Los Susurros en el Viento [One Piece]

V

Roger observó con diversión el como sus hijos habían regresado a su casa, detrás de ellos venían los citadinos, su hermano y un muerto.

-— Se ven como el inicio de una mala broma.

— Y tu como si tu casa fuera un hotel-. Dragon respondió primero antes que Ace lo hiciera.

— ¿Quien murió?—. Fue lo primero que Rayleigh respondió cuando notó que había más de 4 personas afuera de su casa casi a las ocho de la noche—. Ustedes están vivos.

— Necesitas más que esto para matar a tus hijos—. Ace dijo tirando al Skinwalker frente a sus padres—. ¿De quien es?

— No del que buscamos—. Rayleigh respondió sin ninguna clase de intención de explicar más que eso—. ¿Intentó llevarse a alguien?

— A Torao.

— Supongo que está herido.

Rayleigh movió su mano sin mucho interés dejándolos a todos entrar, Law sentía una extraña vibra mientras que Marco y Lucci lo dejaban sobre la mesa del comedor para que fuera tratado, a la distancia, todos los demás estaban hablando un poco alejado de todos, antes de que ellos lograrán empezar una conversación con Rayleigh este los interrumpió.

— Deben irse de aquí.

— ¿Qué-yoi?

— Largo—. Susurró está vez entre dientes—. Ellos se despiertan al medio día, antes de que eso suceda larguense del pueblo, todos ustedes—. Marco y Lucci; siendo los hombres analíticos y serios que eran; lograron mantener la fachada de "preocupación por el interno que casi es asesinado por una entidad maligna del bosque".

— ¡Ray!—. Roger llamó a su pareja, este dejo de vendar el tobillo de Law y volteó a ver a Roger, el hombre más grande se acercó a él para besar su frente—. Iremos a dormir; ¿Puedes con ellos?

— Se que si—. Rayleigh respondió confiado, dejando que él volvería a dejarle un beso en la frente antes de despedirse de ellos.

Fue tenso y silencioso hasta que escucharon cuatro puertas cerrarse, Dragon aún quedó viéndolos unos momentos más antes de subir, fueron los segundos más largos de sus vidas hasta que volvieron a escuchar la puerta cerrarse.

— ¿Te obligan a estar aquí?—. Lucci preguntó a Rayleigh—. ¿Qué esta pasando aquí?

— Su mayor característica es ser egoísta. Es mejor que se vayan antes de que esa cualidad los alcance—. Antes de que los tres fueran capaces de pedir aún más explicaciones, Rayleigh los sujeto y sacó de su casa—. No son peligrosos si sabes vivir con ellos e idiotas como ustedes no están capacitados para eso—. Fue lo único que dijo antes de cerrar la puerta con ellos afuera.

***

— No nos vamos a ir; ¿Verdad?—. Law dijo viendo a Marco y Lucci.

— Me alegra que seas igual de idiota que nosotros-yoi—. Marco respondió, aún que ahora debían vivir con sus internos temporalmente.

— ¿Y qué haremos?—. Esta vez fue Lucci el que pregunto.

— Solo observar, Rayleigh está asustado, pero al mismo tiempo sabe algo que nosotros no-yoi.

— Nos quiere sacar del camino.

— Hay algo más interesante aquí—. Law dijo, más seguro de lo que Lucci y Marco podrían decir—. ¿Hay una biblioteca?

— Reportate enfermo mañana-yoi, encuentra todo lo que puedas—. Marco le dio el permiso, en eso Lucci también le entregó su teléfono—. Es satelital, creo que sería bueno que tuvieras una forma de pedir ayuda en caso de que algo... O alguien decida que haz buscado demasiado profundo.