Melissa, la hermana menor de Meliodas, Zeldris y Estarossa. Como la hija más joven del Rey Demonio, Melissa es tratada como una preciosa joya, protegida del campo de batalla y criada como una princesa demonio. Su cabello dorado, sus ojos verdes y su...
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Narrador omnisciente
Pasaron semanas y finalmente llegó el día de la gran premiación en honor a los Siete Pecados Capitales, quienes habían salvado el reino de Liones. El evento se celebró en el castillo real con una gran ceremonia, donde el rey Bartra, ya completamente recuperado, se encargó personalmente de otorgarles las medallas de reconocimiento a los héroes.
Melissa, vestida con un elegante vestido azul oscuro con detalles dorados, asistió a la ceremonia acompañando a Arthur y a Merlin. Arthur, por su parte, lucía su armadura con orgullo, mientras que la enigmática maga de ojos dorados y cabello negro estaba tan tranquila como siempre.
Melissa no pudo evitar sonreír mientras observaba a los Siete Pecados Capitales recibir sus medallas. Aunque llevaba años en Camelot, ver a su hermano entre ellos la llenaba de un orgullo silencioso.
Después de la ceremonia, los nobles y caballeros celebraban con una gran fiesta en el salón principal del castillo. Mientras Arthur conversaba con algunos de los ministros de Liones, Melissa se quedó con Merlin, quien sorbía tranquilamente de una copa de vino.
—"Te encargarás de Arthur, ¿cierto?" —preguntó Merlin sin rodeos, sin apartar la vista de la fiesta.
Melissa se cruzó de brazos y suspiró.
—"No tienes que pedírmelo, Merlin. No pienso dejarlo solo."
La maga sonrió de lado, satisfecha con la respuesta.
—"Bien. Porque mientras yo me una temporalmente a Meliodas y los demás, alguien debe estar con él. Arthur es muy importante, después de todo."
Melissa asintió con determinación. No necesitaba que nadie le dijera lo valioso que era Arthur para ella. Desde aquel día en que lo protegió de un oso con su magia, supo que él era su ancla. Sin importar lo que ocurriera, ella estaría a su lado.
De pronto, una voz masculina interrumpió sus pensamientos.
—"¡Oye, niña, ven acá un momento!"
Melissa se giró y vio a un hombre alto y delgado de cabello blanco y una cicatriz en la cara acercarse con una sonrisa burlona. A su lado estaban un hada flotante de cabellos anaranjados, una enorme gigante de cabello castaño y un caballero con vestido naranja, excepto por un corte de triángulo invertido en el pecho y la falda.
Era Ban, acompañado por King, Diane y Gowther.
Ban la observó con curiosidad, con los brazos cruzados.
—"Así que tú eres la famosa hermanita del capitán, ¿eh?" —dijo con tono juguetón mientras la miraba de arriba abajo.
Melissa arqueó una ceja y sonrió levemente.
—"¿Famosa? No sabía que hablaban de mí."
Diane, quien estaba detrás de Ban, la miró con emoción.
