HEARTLAND

La vida cambia

Jimin preparaba el desayuno alegremente, era sábado y el cumpleaños de su marido, así es que sería día de celebración, habían pasado ya tres semanas desde el incidente de Namjoon y todos en casa tenían mejor semblante, Jin se veía algo más repuesto y los niños habían empezado a entender que papá ya no viviría en esa casa, pero que los vería muy seguido. Minjoon era el más afectado, lo extrañaba mucho y hablaba todos los días con él, Soomi mientras tuviese un perro o un gato cerca le importaba poco si faltaba alguien.

Yoongi entró a la cocina y el pelirrubio se le lanzó encima abrazándolo con los brazos y las piernas

- Buenos días cumpleañero, ¿sabes que eres el hombre de 28 años más sexy del mundo? -

Yoongi atrapó su boca y lo besó apasionadamente - ¿Y mi regalo? -

- Nada más espera a que llegue la noche bombón-

Ambos se mataron de la risa.

-¿Y Jinyu?-

- Fue con tu padre a buscar huevos-

- Voy a verlo- le dio un apretón en el trasero a su esposo y salió.

Jimin lo miraba caminar por la ventana, cómo amaba a ese hombre, se conocían desde niños, habían ido a la misma escuela y el hermano mayor del pelirrubio era amigo de Yoongi los dos eran miembros del equipo de basquetbol. Jimin cada vez que aparecía Yoongi en su casa se derretía y buscaba cualquier excusa para estar cerca. No se perdió ni un solo partido del equipo y la vez que su madre lo castigó por no haber hecho sus tareas, se salió por la ventana para ir a verlo jugar. El castigo que recibió después por la falta le dio igual, todo valía la pena con tal de estar cerca del hombre a quien tanto quería. A medida que pasaba el tiempo se fueron haciendo grandes amigos, se transformaron en confidentes y dependían mucho el uno del otro, pero Jimin jamás confesaría que en realidad lo amaba con locura.

Cuando Yoongi partió a la Universidad, el mundo se le vino encima, su amado se relacionaría con otras personas y probablemente encontraría alguien a quien entregarle su cariño. Jimin a pesar de todo, estaba contento, sabía que Yoongi estaba cumpliendo un sueño al ir a estudiar agronomía a la universidad. Se enviaban mensajes seguido, a diario prácticamente y las fotos iban y venían. Jimin le contó que pensaba estudiar gastronomía y Yoongi no se sorprendió, conocía las habilidades de su amigo.

Una noche en que Jimin estaba muy nostálgico salió a pasear por el campo de sus padres, se sentía triste, Yoongi estaba en época de exámenes y no habían podido hablar tan seguido como lo hacían siempre, cuanta falta le hacían sus palabras. Unas lágrimas se asomaron a sus ojos, las secó rápidamente, pronto volvería a escuchar su voz. Había decidido volver cuando sonó su teléfono miró la pantalla y era él, su corazón comenzó a saltar, fue tanta la emoción que el aparato cayó al suelo, lo recogió y había dejado de llamar. Rápidamente marcó y del otro lado contestó Yoongi

- Hola-

- Hola, discúlpame, se me cayó el teléfono-

- No hay problema, pensé que estabas durmiendo-

- No aun no-

- ¿Dónde estás? Se escucha ruido-

- Salí a caminar-

- pero Jimin hace frío-

- Necesitaba aire fresco-

- Te puedes enfermar-

- No, estoy abrigado-

- deberías volver a casa-

- Ya lo hare, ¿para qué me llamaste? -