Un Recuerdo.

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(Esto sucedió antes de la explosión)

     Amy estaba solicitando trabajo. Con su buena actitud y responsabilidad, estaba segura que conseguiría un buen puesto.

     Pero no fue así.

     Llego a los oídos de una chica que Amy Rose quería trabajar en la empresa donde laboraba ella, celosa de la rosada metió cizaña en el entrevistador.

     A Amy se le consideraba la favorita de los maestros, aunque no le cedieran notas perfectas, ellos la preferían por su honestidad.

     Lamentablemente no se puede decir que ese haya sido el mismo afecto de sus compañeros hacia ella.

     Amy sin saber que iba a ser negada su petición, espero pacientemente a que acabaran los 8 días de espera.

     Al octavo día, Shadow estaba llegando a su casa, era medio día, por lo que no estaba tan cansado.

     Desde el primer piso de aquella gran casa se escuchaba a alguien sollozando a todo pulmón. No le dio importancia hasta que escucho que algo había sido quebrado.

     Corrió hasta la habitación de donde según él nació el sonido. Efectivamente, en el suelo había un envase roto, era de vidrio por lo que quedaron sus piezas a disposición de cualquiera.

     En un rincón de la habitación estaba Rose, sentada sujetando sus rodillas con sus brazos, su cabeza estaba sobre sus rodillas.

     -¿Se supone que estas embarazada? -Preguntó Shadow un poco fastidiado.

     -Callate... -Ella se volteo para verlo, sus ojos estaban rojos e inchados, se notaba que tenía tiempo llorando.

     -Calmate. -Shadow frunció el ceño.

     -Dejame... -La rosada seguía sollozando.

     Shadow comenzó a caminar con paso firme hacia ella. Ella se volteo para verlo y cuando noto que él se acercaba estirando el brazo gritó.

     -Yaaa me callaré. -Dijo Amy.

     -¿Por que tan repentinamente me haces caso?

     -¿No ibas a golpearme?

     Shadow río bajo. -Claro que no...

     -¿Que ibas a hacer entonces? -Las lágrimas de su rostro ya estaban comenzando a secarse.

     -Estar tan deprimida le afectará. -Shadow eñaló el vientre de Amy.

     -¿Osea que no te preocupas por mi? -Amy hizo un puchero.

     -¿Que crees que te pasaría si derrepente perdieras al bebé?

     -Me muero... -Habló con duda la rosada.

     -Posiblemente.

     -¿Si te preocupas por mi? -Amy tenía su mirada llena de esperanza.

     Shadow no habló, solo le dió una sonrisa de lado y se fue; regresando al nivel de abajo fue por una escoba y pala para recoger el desorden de su pequeña mujer.

     Volviendo al presente, esto venía a la mente de Shadow ya que una escena un tanto peculiar le recordó tal momento.

     Un niño estaba llorando en el suelo por que se le había caído su helado, la mamá luego fue por él, el niño calló de inmediato en silencio pensando que su madre le iría a golpear pero no fue así.

     La madre tomó a su hijo en sus brazos, lo cargo y comenzó a consolarlo mientras lo achineaba.

     Shadow estaba en la ventana del tercer piso de la casa de Silver, desde esa vista se lograba apreciar todo con claridad.

     ¿Que otra cosa podría hacer? Estar encerrado mientras te recuperas es algo tedioso.

Back To Reality. -Shadamy.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora