𝗟 𝗢 𝗩 𝗘 𝗛 𝗨 𝗥 𝗧𝗦

IIII

Paso un tiempo desde lo ocurrido, los rumores corrieron sobre Jungkook, yo trata de evadir a las personas que preguntaban por el, Jungkook se aisló por un tiempo, solo hablaba conmigo, me dolía verlo así.

Me encontraba de camino a su casa, el no había ido a la preparatoria desde el incidente procuraba anotar todo para llevarle los apuntes.

Llegué a su casa y toque la puerta, un Jungkook ojeroso y con el cabello despeinó me abrió la puerta se veía jodidamente lindo.

– Ugh, lo siento, pasa – se hizo a un lado, la casa era de un ambiente agradable, estaba limpia olía a jazmín y orquídeas, era bonita...nada parecida a lo que era mi casa – disculpa el desorden, no esperaba que me visitaras ¿A qué se debe?.

– Te traje los apuntes (te extrañaba) ¿Te sientes mejor? – me acerque a él quise tomar su rostro en mis manos pero solo lo mire fijamente, deseaba tanto poder sonreír.

– Muchas gracias, yo estoy un poco mejor, quería hablar algo contigo – ambos fuimos a su habitación, era linda, estaba pintada de celeste y tenía poster de anime y superhéroes, Jungkook era medio rarito al veces.

–  ¿De que quieres hablar? – vi como saco su teléfono y empezó a buscar algo, me lo entrego levemente nervioso.

Era su chat con jimin y...oh, habían vuelto a hablar.

– ¿Porqué? – le pregunté en voz baja.

– Hable con el, quedamos de amigos, ellos volverán al grupo, sabes que no me gusta estar peleado con las personas, mis sentimientos por jimin siguen ahí, pero juro que no intentaré nada.

Mis manos temblaban, quería decirle algo, quería decirle que no quería ir jimin vuelva a grupo, quería decirle que me hacía sentir reemplazado, quería gritar y reclamarle si yo no era sufriendo para el.

– Jungkook, te haces daño no deberías hablar con el por un tiempo, mira como te dejo, te lastimas, amar es dejar ir – trate de sonar lo menos molesto posible – podes ser solo tu, yo y namjoon, no es necesario que ellos vuelvan, jimin nisiquiera te a busca–

– CÁLLATE.

Ese grito me hizo callarme rápido, lo mire sorprendido.

– estás siendo egoísta taehyung, hasta pareciera que yo te gustara, no seas ridículo, ellos van a volver al grupo, solo te estaba comentando.

Lo mire para luego agachar la cabeza, asentí.

– creo que mejor me retiro.

Me levanté y tomé mis cosas, salí corriendo de ahí, me sentía agobiado, yo no era egoísta, simplemente no quería volver a sentirme miserable.

Llegué a mi casa, mi madre se encontraba con mi hermana ambas estaban haciendo lo que parecía un pastel, me acerque a mi mamá para abrazarla.

– eh vuelto – ella se dió la vuelta y me devolvió el abrazo.

– cariño ¿dónde estabas? Te dije que siempre tienes que pedirme permiso y avisarme a dónde vas a ir – tomo mi rostro en sus manos y apartó los mechones de pelo en mi cara – no te pongas así el cabello, te tapa tu linda carita.

– lo siento – le respondí, mi hermana me abrazo una pierna yo sobe levemente su sedoso cabello.

– tu papá llamo está mañana.

Detuve las caricias en la cabeza de mi hermana, la mire levemente molesto.

– ¿Que quería? –.

– Quiere hablar contigo...hijo, deberías perdonarlo, tu sabes que si no es así tu alma estará condenada al infierno.

Oh, olvidé menciónar, mi mamá era pastora en una iglesia reconocida.

– mamá, no me siento listo ¿Está bien? Prometo hablar con el – ella suspiro para luego volver a su labor.

Subí a mi habitación, abrí la puerta y mi lindo y obeso gato estaba hechadito en mi cama.

– buenas noches bolita.

Al otro día en la preparatoria, Jungkook llegó y se sentó al lado mi, me saque mis audífonos.

– taehyung, lamento mucho lo de ayer, no quise decir eso, estaba estresado, gracias por lo apuntes, prometo no gritarte más ¿Okey? – me abrazo por los hombros, lo mire y sonreí levemente.

– no pasa nada fue mi error.

Estabámos tan bien hasta que apareció el.

– Hey ¿Cómo están? – se acerco a nosotros con una sonrisa radiante, Jungkook quedó embobado y simplemente me soltó.

Me hice pequeño en mi asiento mientras escuchaba a ambos conversar animadamente ¿Jungkook acaso olvido todo lo que jimin le dijo?

– Tae, te dejo un momento, jimin tiene hambre voy a invitarle algo de la cafetería, vuelvo luego ¿Si? –no pude responder porque ya se había ido, otra vez ese horrible sentimiento volvio a mi, me sentia rechazado.

Jimin estaba con su novio y Jungkook, yo solo los observaba en silencio.

– Oigan, taehyung no habla ¿Es tímido? –pregunto yoongi con leve cuirosidad.

– Un poco, el no habla mucho, rara vez dice algo, jimin siempre es el que saca conversaciones. – respondió jungkook, el siempre defendía a jimin, yo no era nada.

No quise opinar seguí mirando mi teléfono, no podía alejarme de Jungkook, aunque lo intentará no podía hacerlo.