Derribar.

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Sieun no es alguien que se distraiga. Cuando se fija una meta, centra su mente plenamente en alcanzar dicha meta. Y si alguien se atreve a interponerse en su camino, él no lo rodeará, lo hará salirse de él. Y últimamente, por alguna razón, la gente disfruta mucho interponiéndose en su camino.

Sieun no es atlético, apenas puede correr 500 m sin sentir que se va a desmayar, y puede que sea inteligente, pero su falta de práctica física le ha estado molestando últimamente. Pensó que tal vez con todas las peleas en las que se había metido, sería hora de mejorar un poco en ese frente. O, al menos, Suho se lo dijo y Sieun estuvo de acuerdo.

Suho también se ha interpuesto mucho en el camino de Sieun últimamente. Bueno, no exactamente en el camino, sino más bien al lado de él, como si estuviera caminando junto a Sieun cuando Sieun nunca se lo pidió en primer lugar porque Sieun no necesita que nadie camine con él, él nunca lo ha hecho. Pero ahora ya no intenta decirle que camine hacia otro lugar.

Bumseok también caminaba con ellos. Él es incluso la razón por la que empezaron a caminar juntos, los tres. Pero ahora, cuando Sieun mira, Bumseok ya no está a la vista. Sieun nunca pensó que se preocuparía por algo como esto.

Todas estas cosas pueden parecer no relacionadas, pero todas se juntan hoy, mientras Sieun se deja caer en el banco, jadeando, y Suho está acostado en el banco de al lado, preguntándole si se comunicó con Bumseok. No lo ha hecho. Sieun sugiere que lo visiten más tarde, y Suho acepta, incluso si Sieun puede oír en su voz que todavía está enojado por el comportamiento de Bumseok.

Suho saca las piernas del banco y se levanta con las manos todavía en los bolsillos gracias al impulso. Sieun intentó explicarle la física, pero a Suho realmente no le importa, sólo lo hace para verse bien. Sieun nunca admitirá que lo hace.

-¡Está bien! Levántate. —le dice a Sieun con tono de entrenador deportivo.

Sieun frunce el ceño.

-¿Para qué? Pensé que hoy íbamos a correr, ¿qué más quieres?.

-Dije que estamos entrenando. —Suho saca las manos de sus bolsillos solo para aplaudir y hacerle un gesto a Sieun para que se levante y se coloque en posición—. Repasemos lo básico.

Sieun lo mira incrédulo, ya exhausto por la carrera. Está a punto de quejarse, pero Suho lo agarra del brazo y lo levanta, dándole una palmada en el trasero por si acaso.

Sieun se burla.

-Eres insoportable.

-Me amas. —Tiene esa estúpida sonrisa en su rostro y Sieun pone los ojos en blanco—. Ahora vamos, vayamos allí.

Sieun lo sigue, aunque un poco de mala gana, pero Suho lo toma como lo que es: una victoria. Se quita la chaqueta y la tira a un lado.

-Está bien. Primero, postura.

Suho se balancea un poco de una pierna a otra, como si estuviera sacudiéndose el dolor de andar en bicicleta de reparto toda la noche.

-Pies separados al ancho de los hombros.—Sieun suspira. Suho lo ignora y se mueve para que su pie derecho quede más atrás del izquierdo—. Gire los pies en diagonal.

-Te dije que no necesito esto.—Suho lo mira y Sieun puede ver las bolsas bajo sus ojos tan claras como el día—. Solo ve y duerme, debes estar cansado.

Suho le devuelve la mirada por un momento, pero se encoge de hombros.

—No te preocupes, no estoy cansado.—Señala los pies de Sieun—. Ahora ven.

Sieun suspira de nuevo, pero arrastra su pie derecho hacia atrás. Entonces, Suho se acerca a él y le agarra la barbilla. Está mirando la parte inferior de la cara de Sieun mientras Sieun lo mira directamente a los ojos, como siempre.

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⏰ Última actualización: Aug 15 ⏰

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Suho and Sieun - OneshotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora