Mukahi Aori y Angelo Kaze estaban teniendo una agradable conversación desde sus respectivas celdas.
El tema del que estaban hablando era un grupo musical que aparentemente ambos seguían en secreto por temor a la presión pública.
Mientras ellos conversaban con relativa tranquilidad. Las entidades absolutas detrás de ellos se estaban estrechando las manos y presentándose formalmente.
Uno de ellos le pregunta al otro: "¿Por qué tu humano tiene un contador de muerte diferente a cero?".
El otro responde que: "Debido a un accidente a las afueras de esta ciudad mi humano termino muerto".
"No pudo protegerlo, así que en compensación le devolvió la vida".
Esta entidad que sentía cierto apego a la vida mortal era la Deidad de la Compasión.
Frente a este tipo de sentimentalismo humano la Deidad de los Deseos solo pudo dar un visto malo a su acción de intervenir en el desarrollo de este mundo por una razón tan absurda.
La Deidad de la Compasión insiste que no hay problema con su intervención, ya que está haciendo pasar su presencia absoluta con la maldición de 'Uno que no quiere morir'.
Ya habló de esto con el Administrador y este aceptó con gusto que su intervención divina se hiciera pasar por el efecto de una maldición.
Aunque claro, le dejo la advertencia de que, si alguien descubre con certeza que no se trata de una maldición, entonces deberá dejar de hacerlo de inmediato.
La Deidad de los Deseos asiente con la cabeza ante la astucia de la Deidad de la Compasión.
Es entonces que la Deidad de la Compasión le dice a la Deidad de los Deseos que enfoque su visión a lo que se dirige a máxima velocidad hacia donde estaban sus respectivos humanos.
Los ojos de la Deidad de los Deseos se abren de sorpresa al percibir como varios misiles de alto calibre se dirigen a la ciudad S. Eran demasiados como para poder desviarlos disimuladamente a todos para que ninguno lastimara su humano.
'Su humano 'Angelo Kaze' iba morir'. La Deidad de los Deseos lo aceptó con completa indiferencia.
Aunque esa indiferencia no duró mucho.
La Deidad de los Deseos mira con desconcierto como su humano 'Angelo Kaze' trata de colarse a la celda del humano Mukahi Aori.
Esta escena le resultó extrañamente familiar.
Como si ya la hubiera visto antes.
Mucho antes que asumiera su rol como la Deidad de los Deseos.
La Deidad de los Deseos tuvo curiosidad sobre esto, así que superpuso una de sus manos para alterar el flujo natural de este mundo.
La Deidad de la Compasión lo detiene de lo que estaba a punto de hacer.
Por ley, si intervenían demasiado podían generar el colapso de este mundo o incluso de la línea temporal.
La Deidad de los Deseos le dijo que ya sabía eso y que debería saber que lo que estaba a punto de hacer no iba provocar ni en lo más mínimo ese escenario.
Solo iba infectar a su humano 'Angelo Kaze' con el virus zombi para que este pudiese sobrevivir al impacto de los misiles.
Aun así, la Deidad de la Compasión le dijo que no debería apresurar las cosas.
Convertir al humano Angelo Kaze en un zombi tal vez pudo haber sido lo único que él cómo la Deidad de los Deseos podía hacer para protegerlo.
Sin embargo, ahora había otra salida.
La Deidad de la Compasión estaba junto a él.
Y la Deidad de la Compasión ahora podía revivir a las personas con total libertad, siempre y cuando las considere dignas de una segunda oportunidad (Esto forma parte del canon de la maldición de Uno que no quiere morir).
La Deidad de la Compasión le recordó eso a la Deidad de los Deseos.
La Deidad de los Deseos ante esta propuesta, solo pudo preguntarle a la Deidad de la Compasión porqué parecía que tenía la intención de ayudarlo.
La Deidad de la Compasión respondió que no debería pensarlo demasiado porque esto solo era un favor entre deidades del principio.
'Deidades del principio'. Recordarle quienes eran hizo que la Deidad de los Deseos ya no pusiese tanto sentimentalismo humano a la vida de Angelo Kaze.
Solo se quedó observando como Angelo Kaze y Mukahi Aori eran reducidos a cenizas por el impacto de varios misiles de alto calibre.
Mantuvo una mirada indiferente al ver como ambos volvían a la vida gracias al poder absoluto de la Deidad de la Compasión.
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Park Moon miró un rato más las direcciones que estaba apuntando la 'Brújula de los caídos'.
El alcance de esta maniobra a gran escala, donde se atrae a grandes potencias del fin del mundo a un solo lugar, solo era algo que un protagonista masculino renacido por segunda vez podría hacer.
Park Moon que se leyó la novela diez veces puede sostener con completa seguridad esa última afirmación.
La pregunta era '¿Cómo llegó hasta aquí?' Si este no era el segundo mundo entonces '¿Era un tercer mundo?'.
'¿Acaso estaba predestinado que al final de la novela el protagonista masculino renaciera por segunda vez?'.
En ese caso, eso solo podía significar que en esta línea temporal estaba destinado que Lee Shion renacido hiciera equipo con 'Lee Shion renacido por segunda vez'.
Lo que llevaría aun trio amoroso entre dos protagonistas masculinos y una protagonista femenina.
Entonces el fatídico final de la novela se evitaría y la Puerta al Infierno jamás sería abierta.
Con este nuevo desenlace no sería extraño que todo se resumiera en un solo volumen de la novela.
'Que dolor de cabeza' Pensó Park Moon al tratar de darle sentido al reciente advenimiento del protagonista masculino renacido por segunda vez.
Un trio amoroso entre dos protagonistas masculinos y una protagonista femenina.
Eso ya era demasiado para él cómo lector.
Ahora tenía que tolerar otra red de acontecimientos inesperados con respecto a los protagonistas de este mundo.
Lo bueno es que ese trio amoroso de protagonistas es algo que nunca va a ocurrir.
A menos que la protagonista femenina se obsesione con hacer ese trio.
Un escalofrió recorrió el cuerpo de Park Moon al pensar en ese posible futuro en el que la protagonista femenina se las arreglara para llevarse a Lee Shion no renacido de su lado.
Con todo lo que ha pasado este último mes. Esto era algo que él jamás permitiría.
'Abandoné mis sueños y esperanzas por ese maldito idiota, no voy a quedarme quieto viendo como una protagonista femenina hace que mi sacrificio no valga nada'. Juró internamente Park Moon.
Con esto Park Moon se propuso a separar a las grandes potencias del fin del mundo en dos bandos.
El bando que involucra a la protagonista femenina, y el bando que no involucra a la protagonista femenina.
Park Moon como siempre se ha propuesto pertenecer al segundo.
Donde puede vivir una vida tranquila alejado de todos los problemas mayores del fin del mundo.
Park Moon así termina de atarse el nudo de la corbata para finalmente salir de compras con Lee Shion.
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Transmigración al mundo de Zombie Land Return. Versión Re
FantasyPark Moon transmigró al cuerpo de un personaje con el mismo nombre que ni si quiera puede considerarse carne de cañón en una de las novelas más populares de su generación. Antes de que el fin del mundo comience necesita encontrar un medio de supervi...
