ZORO
Necesitaba seguir con su labor, debía seguir conquistando al cocinero. Así que necesitaba otra idea para salir con el cocinero, ya se había desgastado pensando para la anterior cita, ya sus neuronas no le daban para más. Tampoco quería preguntar, tendría que pensar por sí solo. Debía tomar apuntes de lo que ya había hecho y de lo que a Sanji le gustaba.
Al cocinero le gustaba cocinar, así que ya lo había llevado a un buen restaurante para que cocinara con un buen cocinero. Allí mismo habían comido juntos y hablado también. Ya le había dado flores y lo había elogiado por la comida, tanto en el restaurante como en el barco. De la misma forma lo había ayudado en lavar los platos y en acomodar la comida para cada uno. Siguiendo todo lo que había hecho para estar cerca con el cocinero ¿qué más le faltaba por hacer?
-Marimo- habla el cocinero tratando de sacar al espadachín de sus pensamientos.
Este sacude la cabeza al darse cuenta que había estado sentado toda la mañana mientras pensaba en como estar con el cocinero. Aunque la verdad no le había servido de nada, porque al final no tenía ni una idea de cómo hacerlo
-¿Sí?- responde algo aturdido el espadachín.
-Solo... quería agradecerte por las atenciones que me has dado. Son muy valiosas para mí- menciona Sanji con una sonrisa.
En cierto modo sí había dado resultado. Le faltaba poco para ver los últimos efectos de sus acciones. Solo necesitaba un empujón más, debía hacer algo, algo en lo cual solo ellos dos existieran. Pero ya no tenía cabeza para pensar.
-Solo quiero que te enamores de mí- al terminar de decir eso. El espadachín se da cuenta de lo que había dicho. Así que con ambas manos se tapa la boca y trata de no dirigir la mirada al cocinero, quien lo veía sonrojado y alegre.
-No seas idiota sí yo ya lo estoy, y además creo yo que lo que tú estás haciendo es para que tú mismo sientas algo por mí- aclara el cocinero sentándose a un lado del espadachín.
-Claro que no- responde el espadachín.
No era cierto. Él hacia todas esas cosas era por Sanji, jamás tuvo la intención de hacerlo por él mismo. Aunque era cierto que Sanji ya sentía algo por él, entonces el único que "no sentía nada" era el espadachín. Pero simplemente él no lo aceptaba, siempre ha creído que no siente nada por el cocinero, pero no significaba que no pudiera llegar a sentir algo. Así que solo necesitaba tiempo si en algún momento resultaba algún cariño hacia el cocinero.
-¿Seguro?- levanta Sanji la ceja y acercándose al espadachín.
Este al sentir el calor de Sanji, sabía que ya estaba demasiado cerca. Así que cuidadosamente alejó al cocinero, haciendo que este se sorprendiera por la actitud del espadachín. Zoro no quería que alguien los viera, no era porque tuviera vergüenza por estar al lado de Sanji o algo por el estilo, solo que no quería que malinterpretaran las cosas. Pensarían que ya tenían algo o cosas así, pero simplemente quería hacer las cosas lento, para que Sanji supiera que él iba enserio.
-¿No me quieres cerca?- pregunta desanimado el cocinero.
"Este idiota no entiende lo que intento hacer"
-Solo quiero ir lento. No quiero que alguien malinterprete, quiero que te quede algo claro cejillas- el espadachín mirando fijo al cocinero suspira para poder tomar aire para decir todo lo que tenía en mente. –Quiero que esto sea serio, quiero que esto no sea solo un pasatiempo o algo. Como te había dicho, no sé lo que siento pero no significa que no quiera estar contigo. Así que no intentes hacer algo fuera de lo común ¿sí?- termina el espadachín soltando el aire que estaba sosteniendo por varios minutos.
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Gracias a la investigación (Zosan)
RomanceUn día Sanji despierta locamente enamorado de ¿Zoro? Este no sabe qué hacer por aquel sentimiento, así que solo se deja llevar por lo que éste siente. Pero un día desaparece dejando a los Mugiwara desconcertados. ¿Dónde estaba Sanji realmente? *Dere...