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Emmett sabía que no quería ser solo un amigo de Rory. Él añoraba más. Ahora que tenía el privilegio de estar a su lado era imposible no imaginar extenuantes fantasías donde Rory protagonizaba.
Bastaba decir que su respiración se aceleraba, la ponzoña se le juntaba y su aliento subía y bajaba por su garganta. Emmett se sentía como un crío descubriendo su sexualidad nuevamente. Edward y Jasper ya no querían estar siquiera cerca de él. Sus pensamientos y sus emociones eran un remolino en el cual Rory era la protagonista.
No tenía la menor idea de cómo se había reprimido en presencia de la jóven. Realmente.
Justo en ese momento se encontraba junto a la bella humana en casa. Pues en el transcurso de las siguientes semanas comenzarían los exámenes del primer periodo por lo que Rory tenía que estudiar el doble—por obvias razones—lo que servía también como una buena excusa para Emmett de estar cerca suyo.
Además de él, las únicas vampiras que se encontraban en casa eran Esme y Rosalie, pues Emmett amablemente le había pedido a Alice que se marchara con Jasper mientras que Edward se había ido a cazar para saciar la sed de drenar a Bella Swan.
En ese preciso momento estaban estudiando álgebra, cuya materia en particular se le dificultaba a Rory.
“... después tienes que intercambiar los números, de modo que el resultado de la x es ye, y ye es x... Sí, justo así. Ahora saca la raíz cuadrada... y listo, ¿lo vez? Es sencillo”.
“Oh, ¿y ya está?”, preguntó Rory, cansada.
Emmett asintió dándole una sonrisa. —“Ahora hazlo sin ayuda, si me necesitas estaré aquí. ”
La observó fruncir el ceño y sacar la lengua tiernamente. Estaba muy concentrada. Y aún así se veía preciosísima, como un ángel. Ese día Rory se había puesto un bálsamo rojo que le hacía ver los labios mucho más exquisitos y jugosos ¿Qué se sentiría tocarlos con lo suyos?, se preguntaba ¿Qué haría ella sí él lo hacía? Tal vez le diría que era un loco de remate o tal vez le devolvería gustosamente el gesto. Se inclinaría, depositaría un tierno beso en la comisura de sus labios, y acto seguido, continuaría sobre-
“¿Emmett? ”
Emmett parpadeó. Irónicamente, su «oido evolucionado» había fallado y no la había escuchado — “Oh, perdona ¿Decías?”
“Creo que terminé”, murmuró con timidez, acercándole el cuaderno.
En efecto, había terminado. Emmett le sonrió orgulloso al ver sus buenos resultados. “Eso fue impresionante. Sinceramente, hay cientos de chicos de tu edad que tardan una eternidad en aprender esto”
“Quiza eres un profesor”bromeó Rory, Emmett le dió una sonrisa ladina, provocando que los hoyuelos de sus mejillas se marcaran perfectamente:“ Oh, no seas tan engreído.”
“No dije nada. — De todos modos, aprendiste muy rápido, aunque me causa curiosidad... Creo recordar a tu amiga Zoé decir que eras una alumna brillante en tu antiguo instituto.”
