¿Otra vez contigo? Ni loca.

Capítulo 5

La ruidosa alarma me despertó marcando las 6:00 a.m en la pantalla del teléfono.

Me puse mis gafas <que no tenían mucha graduación, eran solo para ver con mas claridad, sobre todo al leer, escribir o utilizar el móvil> y me levanté, frotando mis ojos.

Hoy hice un esfuerzo de salir de la habitación un poco más presentable, aun que tampoco había nadie a quien tuviera que impresionar.

Me peine un poco mirándome en el reflejo y entré al baño de la habitación, que era muy pequeño pero acogedor.

Me lave un poco la cara antes de salir y me senté en la mesa esperando a que, como todas las mañanas, Pau o Nico me pusieran la taza de café en frente. Todos ya estaban despiertos como era de costumbre.

-Ni buenos días.-Dijo Pau, poniendo la taza de café frente a mi.

-Buenos días, y gracias.

-Creo que hay alguien que ya tiene exámenes.-Noe ya arreglada, vestida y maquillada no ayudaba mucho, dar ánimos a veces no era lo suyo.

-¿En serio?-Preguntó Nico, parecía sorprenderle.

-Desgraciadamente.-Mascullé.

-Yo también tengo.-Añadió Luca, quien desde ayer ni si quiera me miraba a la cara.

Era obvio que los dos teníamos exámenes, coincidíamos en algunas clases, sólo que el asistía cuando quería.

-Mucha suerte.

-Gracias Noe, las necesitaré.-Reí.

Después de acabarme la taza de café me arregle rápidamente, apenas me maquille, solo un poco de corrector y rimel para no parecer una muerta viviente y me vestí con unos tejanos apretados y una sudadera de cremallera negra.

Cogí mi mochila y mis cosas y esperé a que Nico cogiera el coche.

Luca ya no venía con nosotros ya que se había comprado una moto que llevaba queriendo desde hace bastante tiempo. Cuando éramos novios ya quería una y al fin la había conseguido. Por lo que había escuchado le costó bastante ahorrar para comprársela.

Y supongo que le costaría... lo nuestro acabó hace dos años y desde ahí ya quería una.

El trayecto con Noe y sin Luca se me hacía bastante corto para ser sinceros. No callaba ni debajo del agua y a veces soltaba cosas delante de los demás como:

"¿Has visto como te miraba en el desayuno Luca?"

"Yo creo que sigue enamorado de ti."

"Ojalá arregléis todo, me muero por que volváis"

"¿Has visto lo que ha dicho para "defenderte"?"

Y cosas así.

A veces era gracioso, porque se creía sus propias películas, pero otras veces era... no sé. Incómodo.

Por lo menos no lo decía delante de él.

Bueno, y cuando vio el brazo de Luca en la cena después del cine estuvo toda la noche interrogándome.

Pero en fin, es Noe.

Hay que quererla de todas formas.

Al bajarme del coche, me despedí de Noe, Nico y Pau, y me dirigí hacia un banco donde Dylan estaba sentado.

-Hola Liseth, ¿qué tal te ha ido el fin de semana?-Me dijo Dylan guardando sus apuntes en la mochila.

-Un poco, movido la verdad, he estado un poco estresada con los exámenes, sobre todo por la noche, que siempre lo dejo todo para lo último.-Me reí.