𝟑𝟎

3.5K 225 16
                                    

𝑮𝒕𝒂𝒏 𝑯𝒆𝒓𝒎𝒂𝒏𝒐: 𝑼𝒏𝒂 𝒔𝒆𝒎𝒂𝒏𝒂(𝑻𝒆𝒓𝒄𝒆𝒓𝒂 𝒑𝒂𝒓𝒕𝒆)· · ─────── ·𖥸· ─────── · ·

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

𝑮𝒕𝒂𝒏 𝑯𝒆𝒓𝒎𝒂𝒏𝒐: 𝑼𝒏𝒂 𝒔𝒆𝒎𝒂𝒏𝒂
(𝑻𝒆𝒓𝒄𝒆𝒓𝒂 𝒑𝒂𝒓𝒕𝒆)
· · ─────── ·𖥸· ─────── · ·

—Francesca, Mateo, por favor, al confesionario —Llamó la voz de Gran Hermano.

—Uh, ¿qué rompimos? —Dijo la rubia mientras se levantaban del sillón.

—Me van a retar por hablar de más por tu culpa —Reclamó el morocho.

—No creo —Contestó tranquila de que no era eso.

Llegaron a la puerta del confesionario y entraron.

—Hola, Big. ¿Todo bien? —Cuestionó la de rulos.

—Hola, Francesca. Todo bien, ¿vos cómo estás?

—Bien también.

—Me alegro. ¿Y vos, Mateo? —Preguntó el dueño de la casa.

—Re bien.

—Bueno. Los llamé porque ustedes van a tener una misión —Informó.

—¡Al fin me tocó! —Festejó la chica, ya que hubieron varias misiones a otros participantes pero nunca había sido elegida para eso.

—La misión va a consistir en que, en la tarde, van a actuar como si tuvieran una gran discusión, y van a tener que permanecer peleados o, incluso, separados. Uno tendrá que optar por abandonar la casa y, si todos creen en su actuación hasta luego de que uno sale de la casa, se les entregará un premio para toda la casa -Explicó lo que tenían que hacer.

—¿Lo de que uno hace como que va a abandonar la casa cuándo sería? —Cuestionó Francesca.

—En la noche, luego de la aparición de Santiago, antes de que se despida —Respondió. —.Por si no se entendió, el que sale de la casa, saldrá en serio, y luego se le permitirá entrar de nuevo -Aclaró.

—Okey, ¿podemos preparar un cachito acá para que salga bien?

—De acuerdo, los dejo un momento —Aceptó Gran Hermano.

—¿Cómo hacemos? —Mateo le preguntó a su novia.

—Tiene que parecer real, algo por lo que podríamos llegar a discutir en serio.

—¡Celos tuyos! —Se le ocurrió rápidamente al morocho.

—Boe, me re quemaste —Se quejó ella y ambos rieron. —. Hagamos así: nos vamos afuera un rato, charlamos un ratito y después empezamos a discutir. Pero no directamente a los gritos porque no se la creen ni en pedo, ¿entendes? —Mateo asintió con la cabeza. —Entonces, ahí cuando vean eso medio tenso, como son todos re chusmas, van a empezar a prestar atención y ahí empezamos a pelear fuerte.

𝐎𝐧𝐞 𝐒𝐡𝐨𝐭𝐬 ─𝐓𝐫𝐮𝐞𝐧𝐨Donde viven las historias. Descúbrelo ahora