𝐆𝐚𝐦𝐞 𝐋𝐨𝐯𝐞: al inicio era para saciar la curiosidad de ella sobre el chico adicto a los vídeojuegos, pero ahora, no podía sacarlo de su mente. Sai estaba decidida a averiguar cómo ganarle en ese extraño juego que hacía que sus sentimientos nu...
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Las clases habían terminado. No había sido un día con muchas actividades.
Un miércoles por la tarde, otro día sentiría bastante pereza, pero ahora sus ojos brillaban mientras el fuerte sonido del balón casi reventaba contra el suelo.
Sentada en la banca junto a Lev, quien al haber entrado recientemente solo estaría viendo. A su otro lado su abuelo estaba cruzado de brazos con una gran sonrisa confiada.
Sai estaba verdaderamente fascinada. Se sentía como una niña de nuevo; cuando acompañó a su abuelo a aquellos partidos. Especialmente las históricas batallas en el basurero. Los partidos entre el Nekoma y el Karasuno.
Ver al equipo del Nekoma incluso aunque fuera un partido de práctica estaba siendo totalmente en serio.
—estuvieron geniales chicos— en cuanto el primer set terminó Sai salto de la banca llena de botellas de agua y toallas para ellos.
—Igai-chan es una gran fan—Kuro aceptó con agradecimiento el agua que ella le acercó.
—aunque no pase el periodo de prueba igualmente estaré en sus partidos. Ha sido increíble aunque sea de práctica — siguió dándoles botellas y toallas. Una enorme sonrisa en ella.
—jajaja— Yaku comenzó a reír enternecido —entonces daremos lo mejor y más para darle un gran partido.— Yaku alzó su botella de agua motivado.
—¡Este partido es para nuestra manager!— El nekoma se sintió lleno de motivación. Ahora definitivamente ganarían ese partido.
—¡Kenma! Es hora de que te luzcas — codeo a su amigo y le dio una sonrisa socarrona. Esa sonrisa confiada mientras se paraba frente a la red.
—agh…— el chico pudin suspiro rendido. Mentira sería si dijera que no se sentia algo motivado. Pero tener que esforzarse de más le molestaba.
—¡Kenma!— Yaku grito después de lanzarse por el balón.
—agh— el chico pudin había comenzado a sudar.
Todo un set de análisis para que Kenma pudiera hacer una estrategia fácil pero lo suficientemente sorprendente para impresionar a la posible manager.
Un partido de práctica con la tensión de un partido oficial. Ese era el nekoma, un equipo que se tomaba en serio cada partido que tenían.
—espero hayas puesto atención, Lev— el entrenador se levantó de la banca junto a Naoi cuando el partido terminó.
Mientras los adultos hablaban Sai y Lev se acercaron a los jugadores que intercambiaban palabras. Ambas academias compartieron más intercambios de palabras antes de que Nohebi (con quienes jabian tenido si partido de práctica) abandonará el gimnasio.
Los jugadores se concentraron en limpiar el gimnasio antes de tener una reunión con su entrenador. Una que según él era muy importante.
—no espere que conocieras a ese tipo— Kuroo le habló a Sai cuando ambos llevaron los balones dentro del armario, refiriéndose a Suguru, el capitán del equipo de Nohebi.
Ambos habían intercambiado algunas palabras, dando a entender que se habían conocido en algún momento.
—lo conocí cuando aún iba a la secundaria…
—cuando aún jugabas…— Kuroo dedujo.
—…si, en realidad no lo conozco bien, solo intercambie algunas palabras con él. No muy agradables por cierto.— ella se rió algo nostálgica.
—acepte que estuvieras en el equipo por que me causas honesta curiosidad, Igai.— los ojos dorados de Kuroo la miraron fijamente.
—dicen que la curiosidad mató al gato.— Sai también lo miró — no es como que sea un gran secreto. Todo aficionado de los nuevos talentos conoce que pasó ese día.— Sai lo miro ahora con algo de tristeza, con miedo. Tenía miedo de decepcionarlos cuando supieran.
Sai podía darse cuenta que los de tercero y tal vez Kenma sabían por completo lo que sucedió en aquel campeonato. Pero tenía miedo que los demás quienes se veían tan emocionados lo descubrieran y se decepcionaran de ella.
