13 COSAS QUE HACEN TODOS LOS INFIELES

1. Utiliza el móvil a escondidas. "Te vibra el móvil, cariño", "Da igual, no será importante". Y al teléfono le siguen llegando notificaciones. Bien, es una de las señales: no responde cuando estás tú delante.

3. Tiene nuevos gustos
De pronto, tiene gustos raros y/o diferentes a los que siempre ha tenido. Es decir, comienza a escuchar un estilo de música que nunca antes había oído, te habla de grupos nuevos que ha descubierto, lee libros nuevos de una temática que no es la suya... e, incluso, tiene aficiones diferentes.

7. Hay un cambio drástico en su apariencia. Las personas se someten a un cambio de imagen cuando quieren obtener un ascenso en el trabajo, cuando llegan a una edad significativa (cumplen los 30, 40 o 50)... o cuando comienzan una nueva relación. Por eso, si tu amorcito de pronto ha modificado su peinado, se ha dejado barba (si es él), se ha cambiado el maquillaje (si es ella) sin razón aparente, solo porque "necesitaba un cambio", hay serias posibilidades de que te la esté pegando.

12. De repente es muy detallista (regalos, sorpresas...). Te hace regalos más caros y sin razón aparente. Te da besos porque sí o se te queda mirando embobado. Sospecha: se siente culpable y quiere aliviar su conciencia tirando de tarjeta o de romanticismo.

—Ah, no hace nada de esto...

Yongbok arrojó el teléfono al fondo más recóndito de su bolsillo sin siquiera darse la oportunidad de terminar el blog. Aún estaba aturdida por aquellos mensajes entre su madre y su amante. Estaba escandalizada y ya no podía ni verle la cara a su madre sin tener deseos de gritarle todo lo que pensaba sobre ella.

Al menos su padre volvió al día siguiente de la pelea y no luego de dos meses como la última vez, aunque claro, no había sido la cosa más cómoda del mundo.

Su madre había salido supuestamente al supermercado esa mañana, pero terminó llegando luego de cuatro horas, con una camisa nueva que le quedaba enorme y con el cabello completamente suelto y alborotado, cuando siempre llevaba una media coleta bien peinada. Innie había visitado la casa por petición de su hermana, pero no mencionó nada al respecto de sus sospechas en ese instante porque Seungmin llegó tan sólo cinco minutos después de su esposa.

Al parecer, el comienzo de una nueva semana no había sido impedimento para las fechorías de Lina y eso solamente terminó por decepcionar más a su hija y hermana. Por ello, esas dos señoritas se encontraban comiendo tristemente de sus respectivos helados dentro de una heladería del centro comercial. Aunque no quisieran aceptarlo, debían resignarse a que aquella salida suya probablemente había resultado ser una oportunidad de oro para que la señora Kim saliera con su amante libremente. Eso las hacía sentirse como unas malditas perdedoras, y lo odiaban completamente.

—Yo aprecio mucho a tu padre —enserió el momento la mayor de las dos, comenzando una nueva charla.

—Papá nunca se queja de ti, aunque pareciera que sí lo hace —prometió la menor, sonriendo miserablemente.

—Ni siquiera sé qué pensar de mi hermana y..., ya no puedo mirar a Bin sin sentirme culpable.

Las dos resoplaron al mismo tiempo sonando demasiado deprimentes para el gusto de los que estaban por ahí. Ya era más que oficial el hecho de que Lina le estaba siendo infiel a Seungmin con su propio hermano. Quisieron encontrar algún error en su lógica y en la unión de los hilos, pero no hubo nada. Todo concordaba tan malditamente bien que no podían evitar enojarse.

—Mamá ni siquiera actúa como una señora infiel —señaló la malhumorada menor—. No oculta su teléfono, si actúa diferente con papá, lo hace como cuando están bien... Ah, ni siquiera podremos tumbar su teatro correctamente.

—Mi hermana es tan jodidamente inteligente —concordó la mayor—. No te sientas ofendida, pero yo todavía no entiendo cómo diablos es que Seungmin y Lina están juntos.

—Y principalmente cómo es que me tuvieron a mí —se quejó de regreso la de cabellos celestes.

Un nuevo suspiro salió de sus bocas. Reprocharon en voz baja y terminaron sus helados, sintiéndose más decepcionadas de lo que se supone no debían. Innie se encargó de pagar la cuenta y Yongbok se encaminó hacia la salida, previendo a dónde sería su nueva parada. No obstante, aquella planeación suya se vio interrumpida cuando sus ojos claramente distinguieron esa larga cabellera castaña ondulada y esa camisa de cuadros anticuada de colores oscuros.

—Tía —llamó, cuando sintió que la otra se acercaba.

Innie quiso preguntar, pero Yongbok no la dejó porque automáticamente le señaló a través de la ventana. Entonces ambas miraron aquel escenario donde el par de tórtolos infieles miraban a través de la vitrina de la joyería. Jisung pareció decirle algo gracioso a Lina porque esta sonrió de manera brillante antes de golpearle el brazo.

—¿Los seguimos? —sugirió la menor.

—Es arriesgado —murmuró la azabache—. Tan sólo pasemos a mirar un poco por ahí, y luego decidimos que hacer —ideó.

Yongbok asintió, tomó la mano de su tía, entrelazando sus dedos y ambas se encaminaron hacia el otro extremo de la plaza. Pasaron por ahí, fingiendo interés en las joyas que se exhibían, miraron a través de los estantes y pudieron ver en el interior cómo Jisung tomaba una sortija y se la colocaba a Lina. Esta miró atenta al anillo y luego de unas cuantas vistas en diferentes ángulos, terminó asintiendo con dirección a su amante para hacerle saber que ese era el que quería.

—Esto es demasiado —masculló la azabache, jaloneando a su sobrina lejos de ahí.

Yongbok realmente pensaba que aún tenía una posibilidad de recuperar a su madre y salvar el matrimonio de sus padres, pero ahora definitivamente todo plan suyo se había ido al garete. Su pecho estaba oprimido y no podía dejar de sentir la dolorosa presión en su pecho. Sintió que su tía detuvo su caminata y se dio la libertad de llorar cuando la mayor la envolvió entre sus brazos.

—Tranquila Bokkie, todo estará bien, pequeña —consoló.

Ni siquiera ella se lo creyó, pero Innie realmente estaba deseando que su hermana abriera los ojos antes de cometer una enorme estupidez. Estaba dispuesta a confrontarla, pero no lo haría con la niña frente a ellas porque entendió que su pequeña sobrina consentida estaba demasiado lastimada como para soportar un poco más.

EL AMANTE DE MAMÁ [skz family universe]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora