Episodio 23: Yokai

143 15 49
                                    

La ventaja de cuándo Leo le enseñaba español a Kubo fue que este mismo le enseñó algo de su idioma, si bien fue su error no tratar de hablarlo con el cuando estaba en Puebla al menos podría ponerlo un poco en practica ahora que estaban en uno de los muchos pueblos de japón en la Prefectura de Gifu.

En realidad ya habían llegado a Japón hace mucho y el plan era seguir viajando hasta dar con el pueblo de Kubo para empezar a tener un punto de referencia y de partida para empezar a buscar pero a diferencia de los demás Leo y Nando necesitaban más suministros de comida. Debido a que Leo era el único que más o menos entendía el idioma gracias a Kubo el era el encargado de comprar las cosas. . .o en este caso intentar hacer trueques ya que no tenían la moneda del lugar, tuvo que intercambiar el valioso peine rosita de Teodora (no dejaba de llorar y regañar a Nando por permitirlo) y muy apenas con eso consiguió una bolsa de arroz suficiente para ambos pero sabía que necesitaba más y conseguir algunas monedas.

Mientras pensaba en eso a la tienda llegó una mujer mayor hablando, sonaba preocupada, no entendía nada pero solo reconoció algunas palabras:

"miedo" "fantasma" "peligro" "calles" "noche" 

Así que dedujo que estaba asustada por un fantasma que vió. . .tiene algo de prisa por encontrar a Kubo pero. . .no puede dejar a un pueblo desprotegido de esa manera a demás de que debía encontrar una manera de conseguir dinero y provisiones rápido, pudo derrotar a muchas criaturas en una noche. . .una larga y pesima noche. . .así que en tería no debería de tardar mucho.

- Nando, creo que tenemos una misión nueva, la haremos rápido y después nos iremos.

- ¿Otra? ¿Ahora que?

Preguntó con ese tipico tono de voz de alguién que definitivamente no quiere hacer nada, de por si pensó que todo esto de los viajes ya se había terminado hasta ahora, no quiere saber que se le ocurrió a Leo esta vez.

- Un espiritu que atormenta este lugar.

Y allí estaba la respuesta que tanto temía, el no estaba convencido pero en cuánto Leo mencionó que podrían pedir una recompensa o pedir más comida para el viaje aceptó de inmediato. Leo intentó hablar con aquella mujer mayor sobre que pasó exactamente, ni uno, ni otro se entendían por lo que ella se terminó yendo, pero por suerte había alguien más que estaba eschandos todo y se acercó, esa persona también vió a la mujer y aunque su español era igual o más reducido que el japones pudo explicar mejor lo que pasaba:

Desde hace un par de años se empezó a ver por las calles el alma de una mujer que anda sola por las calles usando un pañuelo cubriendo la mitad de su cara, al inicio parece una bella mujer normal que en el caso de que te vea te va a hacer una pregunta donde tecnicamente no hay respuesta correcta pero el final puede o no ser mortal, pocos han logrado huir de ella y no existe o nadie ha descubierto como evitarla así que solamente le advirtió que si le preguntaba:

私は美しいと思いますか?
Watashi wa utsukushī to omoimasu ka?

Huyera lo más rápido que pudiera, que no respondiera, solo huyera. . .y el pensaba que la llorona podía ser peor que la nahuala.

Cuándo le explicó todo a Nando ni siquiera se requirrió mucho tiempo para que por "ninguna razón en especial" voluntariamente se ofreciera a quedarse y cuidar del barco volador para que no se lo roben y por si necesitaban huir rápido. . .que valiente hermano mayor tiene.

- Bien, como quieras oriNANDO

Dijo mientras caminaba pero Nando inmediatamente se puso frente a el.

- ¿Como me llamaste?

- Nada, nada, no dije nada.

- ¡Te escuché perfectamente! Pensé que acordamos que no ibas a llamarme así de nuevo si yo dejaba de llamarte chisguete.

IKIGAI (Kuban)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora