The Perfect Bad Boy

Capitulo 18

Brad me suelta la mano, enciende el coche y sigue conduciendo.

Me acomodo en mi asiento y me giro para mirar su perfil. El no despega la vista de la carretera.

Una de sus manos se posa sobre mi rodilla mientras la otra descansa sobre el volante del auto.

Sus labios se curvan en una pequeña sonrisa, esa sonrisa que pocas personas pueden llegar a apreciar y que esconde casi todo el tiempo.

Una ola de electricidad me recorre el cuerpo de arriba a abajo bajo su tacto.

No se lo que siento por el, pero algo me dice que no lo puedo dejar escapar, que debo estar a su lado.

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Enciendo la televisión del apartamento de Brad mientras el prepara la cena.

-Nunca pensé que un chico malo supiera cocinar.-Le digo desde mi asiento.

-Las apariencias engañan.-Me responde.

Brad vive en un pequeño apartamento de un edificio del centro de la ciudad. Vive solo, pero eso no significa que sea un apartamento de un hombre desordenado, al revés, todo está limpio y ordenado.

Me giro y fijo mis sentidos en escuchar lo que dicen en la televisión.

-Y por fin han encontrado y capturado al jefe de la banda de mafiosos de Nueva York. Estaba en el casino de la ciudad junto a otros tres hombres, entre ellos su hijo. Planeaban atracar el casino y robar una gran fortuna.-Dice la mujer que presenta las noticias.-En estos momentos están siendo trasladados a prisión, y mañana se celebrará el juicio.-Finaliza la noticia.

Brad aparece a mi lado con dos platos de comida. Se sienta a mi lado y mira la televisión, en la que ahora informan de otra noticia.

-Estaba Brad.-Dice después de unos segundos.

Asiento con la cabeza.

Debe ser difícil de asimilar que tu hermano este en la cárcel.

El suspira y deja la comida en la pequeña mesa de centro.

-Será mejor que me vaya.-Digo mientras me levanto.

Brad me coge del brazo y me vuelve a sentar en el sillón.

-No. No te vayas, quedate conmigo.-Dice el sin soltarme.- No me dejes tu tampoco Autumn, por favor, prometemelo.-Dice.

Lo miro fijamente a los ojos.

Se que el es el hombre que me atracó, que me secuestro y me llevó con Clay. Pero también es el hombre que me salvó.

-No me iré.-Le respondo.-No te dejaré.

El me sonríe y abraza mientras murmura un suave gracias.

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Despierto en una habitación luminosa, con las paredes verdes, un armario, un escritorio y una cama en el centro.

A mi lado no se encuantra nadie, lo que se me hace raro, ya que recurrido recuerdo que me heché con Brad.

Me levanto de la cama perezosamente, sigo con el vestido que utilicé ayer puesto, y como no tengo más ropa, no tengo más remedio que seguir con el vestido puesto.

Miro la hora en el reloj digital que se encuentra en la mesilla de noche. Las 12:15 am.

Camino descalza por los pasillos del apartamento de Brad hasta encontrar la cocina, donde cogo una manzana y me la como mientras voy al salón.