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OCASO

"Era una obra de teatro y sabía cómo terminaba, no quería hacer una audición para ninguno de los papeles. No era un juego, no era una emoción casual. Era una ruleta rusa de tres balas."

🖇️

Algunas noches todavía puede oler el humo.

Toph colgó su bolso y chaqueta en el gancho antes de moverse hacia su asiento. "Pies ligeros". Saludó suavemente mientras se sentaba en el taburete. Se subió las mangas bruscamente. "¿Ya sacaste la arcilla? Excelente".

Ya podía oler la arcilla húmeda, sus manos buscando en la mesa. Aang empujó el montículo un poco más cerca de su toque errante. "Gracias."

"Parece que no estás durmiendo".

Ella le sacó la lengua. "Ya vas a empezar a preocuparte otra vez. No sé lo digas a Katara".

Apretó la arcilla con fuerza en su agarre. "Tengo un par de problemas ahora mismo, mucho en mi plato, nada de que preocuparte. Pasará muy pronto".

Él se rió. "Esa, casualmente, es la tarea de la semana". Toph frunció el ceño. "¿Cuál es la tarea?"

"Si hubieras llegado a tiempo, te habrías enterado". Ella lo golpeó.

"¡Ow! ¿Cómo tienes esa buena puntería cuando ni siquiera puedes ver?" Se frotó dolorosamente el brazo, agradecido por la bata de manga larga que llevaba puesta mientras la arcilla roja de sus manos manchaba la gruesa tela. "Se supone que debemos hacer un juego de platos. Cuatro platos, cuatro tazas".

El bajo murmullo de la clase hizo que Toph apretara los dientes. "¿Nadie conversa realmente aquí? ¿Están todos mudos o algo así?"

"Tú eres el único discapacitado aquí". Aang agachó el puño esta vez.

"Lo que sea." Empezó a darle forma a la arcilla con cuidado, moviendo los dedos sobre ella con fluidez y buscando posibles bolsas de aire mientras la trabajaba un poco más fuerte.

"¿Cómo ha estado tu semana? No te he visto aquí. Todo lo que hemos hecho últimamente han sido trabajos de historia del arte". Empezó a alisar la superficie.

"Dios, eso fue aburrido.
¿Cómo describo una pintura, de todos modos?"

Golpeó su pie contra el pie de ella desde debajo de su mesa de trabajo. "Mi tío Gyatso estaba enfermo, así que lo cuidé por un tiempo. Su idea de la medicina es comer pastel". Le dijo a ella. "También cree firmemente que arrojar pasteles a sus vecinos desde la ventana de su ático hará que mejore. Karma invertido o algo así".

Toph sonrió. "Lo ayudaste totalmente a tirarles los pasteles, ¿no es así?"

"¡Tenía como seis años cuando hicimos eso!"

"Mentiroso." Sus ojos brillaron.

Él la miró. "Nueve."

🖇️

Conectó su reproductor de música a la estación base del estudio y subió el volumen.

Aang se había ido hace unos minutos, dejándola sola en la habitación. La música se estaba acumulando hasta el punto en que podía sentir las vibraciones en su pecho. Presionó el botón de su reloj, escuchando la voz electrónica leer el tiempo para ella.

"08:25pm".

Toph buscó a tientas su bolso en el gancho, pasando el pulgar por cada pasador. Aang había hecho una serie ellos como regalo de Navidad, todos grabados con varios patrones y formas para que ella los prendiera en su bolso. La ayudaron a decidir qué bolsillo estaba buscando.