Pedro podía sentir los labios de Jorge contra los suyos, era un beso furioso, en el que buscaba algún tipo de dominio sobre el otro que se aferró a su chaqueta intentando no caerse, ya que Jorge lo empujaba hasta la pared blanca del lugar para acorralarlo.
Pedro intentó seguir el ritmo de los besos enojados que él otro le daba, solo logrando agarrar aire nuevamente cuando Jorge se separaba de él para hacer lo mismo.
<<Jorge diviso a Pedro Malo hablando con las mujeres en la cantina. Sintiéndose furioso con este por haber sido traicionado por Pedro. Aquel al que considero su mejor amigo, lo traicionó hace ya un tiempo y se casó con la mujer que Jorge más amaba.
-¡Jorge!-. Le gritó Pedro al verlo, se veía feliz de ver a su "mejor amigo".
Bueno lo mira serio y con ligera amargura, para luego pasar a tener una sonrisa sarcástica en su rostro, mientras miraba al otro de abajo hacia arriba, lo que hizo que Pedro se sintiera nervioso pero ignoro ese sentimiento y siguió con su sonrisa y entusiasmo en si.
-Ah, cuánto desgraciado gusto me da verte-.
-Si...-. Le contesto Jorge, volviendo a poner su mirada seria, quitando rápidamente su sonrisa. -Debe ser un gusto muy desgraciado-.
La sonrisa de Pedro cayó ante las palabras del otro. -Bueno, así digo yo-. Le respondió, tratando de excusarse para evitar una discusión, pero poco le sirvió ya que Jorge no cambió su tono molesto.
-Y así eres -. Le fulminó el más alto con notaría amargura en su voz.
-Tienes razón... -. Concordó Pedro, evitando mirar un poco a los ojos a Bueno, tocándose un poco las manos. -Precisamente eso les estaba diciendo a las muchachas hace rato, soy muy desgraciado -. Dijo Pedro con pequeña culpa en su voz.
-Menos mal que lo reconoces -. Volvió a aparecer una ligera sonrisa ladina en el rostro de Jorge.
-Pos' si -. Dijo Pedro con un ligero asentimiento, antes de que la plática siguiera.
Después de que Jorge le sugiriera a Pedro hablar en privado en la otra habitación del lugar. La plática se torno de lo que Pedro supuso hace unos segundos antes que sería: el como él le quitó la novia a Jorge, y que él era un falso, aunque bueno. Jorge prácticamente había terminado con Rosario, y ella y Pedro en realidad eran primos, él solo le estaba haciendo el favor con ayudarle con la paternidad de su hija y casarse con ella para que la gente no la tachara de nada al ser madre soltera. Pero eso la gente no lo supo, pues era un secreto por el bien de Rosarito. Y sobre que era un falso, pues, ¿Cuál falso, traicionero, sabandija y lo que le seguía? Si él solo estaba ayudando a su prima y bien Jorge fue el que tuvo la culpa. Pero esto poco le importo al otro.
Después de varios minutos de Jorge diciéndole lo mismo, obtuvo una cachetada del más alto que estuvo seguro que dejó una marca roja ahí mismo; y cuando vió que el otro estuvo a punto de irse, lo agarro rápidamente de la manga de su chaqueta, deteniendolo antes de que se fuera, haciendo que esté se volteara a verlo con molestía y confusión en su expresión.
-¡Oigame, Don Jorge! -. Le había exclamado Pedro molesto.
-¿Qué, Pedro? ¿Qué? -. Le dijo Jorge de vuelta, hablándole como si este le hubiera insultado o maldecido de muerte. -Tu no tienes derecho a decirme nada, no tienes derecho de reclamar nada. Eres un traidor, ¡Un mal amigo! -.
-¡Aquí el único mal amigo es usted! -. Le contestó Pedro al otro, apuntandolo con el dedo de forma acusadora. La situación se estaba volviendo más intensa a medida que se seguían insultando y reclamandose. Alguna muchacha o señor chismoso pasaban por enfrente de la habitación que tenía la puerta abierta para ver cómo estos dos peleaban a gritos, olvidando que habían más personas en la cantina.
ESTÁS LEYENDO
Historias Infagretes
Romancecómo lo dice el título, algunas historias cortas de Jorge Negrete y Pedro Infante Con todo el respeto del mundo que se merecen estos grandes actores-cantantes del cine de oro mexicano, todo esto es ficticio y sin el afán de ofender a nadie, si no t...