Historias Infagretes

Jorge papá preocupon

Jorge miró con preocupación y dolor en su rostro al ver cómo una señora se caía de un caballo enorme al intentar montarlo. Sintiendo que el mismo fue el que se pegó contra el piso.

—¿Si viste? —. Le preguntó Pedro a su lado teniendo a Diana de 6 años cargándola en sus brazos mientras miraba del caballo a Jorge y de Jorge al caballo.

—Si —. Le respondió el más alto aún con dolor en su expresión, sobándose inconscientemente la parte de la cabeza que la mujer se golpeo.

—Se pego bien feo, ¿verdad? —. Volvió a preguntar Pedro ahora mirándolo nada más a él en ves del caballo. Diana jugaba con un mechón de su cabello.

—Si, horrible que se golpeó esa mujer —. Respondió nuevamente el charro, mirando a su pareja de vuelta.

—¿Pero está muy bonito el caballo verdad? —. Hizo énfasis en la palabra bonito mientras señalaba al caballo con una mano. A lo lejos, el muchacho que traía el caballo para rentar el paseo en el animal trataba de calmar a la señora y su familia y de paso, calmar al percherón también.

—Eso si, no cabe duda —. Contestó Negrete, asintiendo.

—Y a Dianita le gustan, ¿verdad? —. Le sonrió el ídolo de México, con una mirada inocente.

—... Si, Pedro. Le gustan los caballos —. Volvió a asentir ahora más despacio, entrecerrando los ojos mientras lo veía.

—¿Y si la subimos al caballo? —.

—... —.

—Ándaleee, ¿o apoco le vas a negar a tu hija andar en caballo? —.

—Está muy grande para la niña, mejor a otro —. El ex militar miró de su hija al animal, buscando si tal vez había uno más pequeño pero solo estaba ese grandote.

—¡Ándale Jorge! Se va a ver bien padre —. Insistió Infante, rogándole al otro.

—Se puede caer —. Le fulminó Jorge, negándose completamente ante la idea de Pedro.

—¡Yo la cuido! ¿Verdad que si, Dianita —. Dijo, mirando a la niña pequeña en sus brazos, que se aferraba a él como un bebé koala a su mamá. La chiquilla volteo a ver a su otro papá y le asintió rápidamente.

—Pedro... —.

Cuando estuvo a punto de decir algo más en contra, Diana y Pedro pusieron cara de perro abandonado, y Jorge no pudo negarse más.

—Pero donde se caiga, te tiro yo de un edificio de 50 metros —. Le dijo enojado antes de hacerle un ademán a su novio para que llevara a la niña con el animal.

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Basado en qué ayer vi como una señora se caía de un caballo😥
No supe cómo ponerle de título😔