Æspa and Maite

𓆩 Sexto Capítulo 𓆪

Cuando bajamos del bús nos encontramos a Sandra y Helena esperándonos a fuera.

-Que tal te fue bella durmiente. -Me dijo Sandra mientras me acercaba a ella para darle un abrazo.

-No sé, tan solo me quedé dormida. -Contesté cansada.

-Bueno, parad de hablar y vamos a recoger la hoja de pistas. -Propuso Helena.

Fuimos a recoger el folio de pistas y empezamos a buscar, íbamos con un poco de retraso por el incidente del autobús, pero se hizo lo que pudo.

_UNAS HORAS DESPUÉS_

Ya terminamos de buscar y salimos del terreno para volver al bús de nuevo, quedamos 6tos, y había seis grupos, ¡qué bien! (Broma quedamos últimos fue un horror).

Me coloqué en mi asiento del autobús para volver a la escuela, a mi lado se puso Juwoo, intenté ignorarle pero, ¡RAYOS! Caí dormida otra vez, no en el hombro de Juwoo, sino en la ventana, y tremendo golpetazo que me dí, creo que se me abolló la cabeza, Helena me dijo que mi cabeza sonó, que genial.

-Maite, ¿estás bien? -Me dijo Juwoo, obvio no le escuché, ni siquiera sé porque me habló si estaba dormida, no le oiría de todos modos.

-Juwoo, ¿qué pasó?¿mataste a Maite? Sabía que no le tenía que dejar tener novio. - Contó Sandra.

-No es mi novia, ¿cuántas veces te lo tendré que repetir hasta que te calles? Probablemente infinitas, porque pedazo habladora estás hecha.

-Ay ya, tampoco es para tanto. -Suspiró Sandra.

-Sabía que me caerías mal, acerté. -Juwoo colocó mi cabeza en su hombro, mejor, no me custa comer ventana.

Esta vez desperté antes de que acabara el viaje, ví mi cabeza apoyada en el hombro de Juwoo y nuestros brazos cogidos.

-¿Tu hombro está tan duro o por qué siento mi cabeza plana? -Dije medio dormida.

-Creo que te volviste tan molesta como Sandra. -No entendí esa frase.

-Calla. -Acto seguido volví a poner mi cabeza en el hombro de Juwoo, él cogió mi mano.

Desperté justo cuando el bus se detenió y me bajé.

-¿Qué tal pasaste la siesta?, ¿en qué soñaste? -Preguntó Helena.

-Nada. -Respondí, para nada había soñado que le lavaba los pies a Giselle, PARA NADA.

Volvimos a nuestras casas.