Epílogo...

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   Perla:

Un año había pasado desde aquel día en el hospital interdimensional, cuando Perla y Gary se habían despedido con lágrimas y besos. Perla había regresado a su universo, volviendo a su vida de ingeniera y arquitecta. Aunque su corazón aún dolía por la separación, había encontrado consuelo en su trabajo y en las personas que la rodeaban.

Una tarde, mientras caminaba por un parque cerca de su casa, Perla se detuvo frente a las vías del tren. Recordó la última conversación con Gary, sus palabras llenas de amor y tristeza. Había evitado este lugar durante meses, pero hoy sentía que debía enfrentarlo.

El tren pasó rugiendo a su lado, el sonido ensordecedor resonando en sus oídos. Cerró los ojos, dejando que los recuerdos la inundaran. Recordó los momentos compartidos con Gary, sus risas, sus discusiones y su confesión de amor. Sabía que había tomado la decisión correcta, aunque eso no hacía que el dolor fuera más fácil de soportar.

Perla se enteró de un accidente reciente en esas mismas vías. Un tren había descarrilado, causando caos y pánico. Pero también había oído hablar de un héroe anónimo que había arriesgado su vida para salvar a varios pasajeros. Aunque no sabía quién era, sentía una conexión inexplicable con ese héroe. Tal vez era una señal de que el amor y la valentía siempre encontrarían una forma de manifestarse, sin importar las circunstancias.

Mientras caminaba de regreso a su casa, Perla sonrió con melancolía. Sabía que nunca olvidaría a Gary, pero también entendía que la vida continuaba. Ella seguiría adelante, llevando consigo el amor que habían compartido y utilizando esa fuerza para enfrentar cualquier desafío que el universo le presentara.

   Gary

En el universo de Gary, la vida había retomado su curso, aunque con una sombra constante en su corazón. Había vuelto a su trabajo de explorador, utilizando cada descubrimiento y cada misión como una distracción del vacío que sentía por la ausencia de Perla.

Una tarde, mientras observaba un tren pasar desde su oficina, Gary recibió noticias de un accidente en las vías. Un tren había descarrilado, y muchas personas estaban heridas. Sin pensarlo dos veces, Gary corrió hacia el lugar del accidente, su corazón latiendo con fuerza.

Cuando llegó, el caos era absoluto. Sin embargo, su instinto y entrenamiento lo guiaron. Ayudó a evacuar a los pasajeros atrapados, utilizando todas sus habilidades para salvar tantas vidas como fuera posible. Entre el humo y los escombros, sintió una conexión con Perla, como si su amor le diera fuerzas para seguir adelante.

Después de horas de trabajo incansable, Gary se sentó junto a las vías, exhausto pero satisfecho. Había salvado muchas vidas, pero sabía que el verdadero héroe en su vida era Perla. Ella había sido su inspiración, su guía, y aunque ya no estaban juntos, su influencia aún brillaba en cada acción que tomaba.

Miró las vías del tren, recordando su despedida. Sabía que el amor que compartían siempre estaría con él, una fuerza invisible que lo empujaba a ser mejor. Aunque no podía estar con Perla, su amor seguía siendo una luz en su vida, guiándolo en los momentos más oscuros.

Gary se levantó, decidido a seguir adelante. Sabía que el universo estaba lleno de misterios y aventuras por descubrir, y que Perla siempre estaría en su corazón, sin importar las barreras que los separaran. El accidente en las vías había sido un recordatorio de la fragilidad de la vida, pero también de la fuerza del amor y el sacrificio.

Con una última mirada a las vías, Gary se alejó, listo para enfrentar lo que el futuro le deparara, llevando consigo el amor eterno que compartía con Perla, una conexión que trascendía el tiempo y el espacio.

Esto fue... Accidente Sobre Las Vías: Un Amor Multiversal.

Accidente Sobre Las VíasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora