¿Has escuchado del efecto mariposa?
Una pequeña decisión que puede cambiarlo todo.
Un pequeño rayo de luz se asoma por el oscuro Gotham, una gota de esperanza entre caos y destrucción.
¿Será posible que esté rayo de luz pueda superar todas las oscur...
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El tiempo ya había pasado, se estaba adaptando a su nueva vida y aquello le encantaba.
Poco a poco cubría los huecos de su mente con recuerdos similares.
Tenía nuevos amigos y una linda vida, o eso quería creer, no podía extrañar algo que no recordaba así que no lo medito demasiado.
Algún día tendría que volver a Gotham y lo sabía, no podía escapar de su pasado por más que quisiera, no estaba mentalmente en la mejor situación, era una hoja en blanco, regresar a Gotham era de las últimas opciones que tenía.
Sabía que si volvía a Gotham no sería fácil, la mayoría de hospitales lo conocían perfectamente y no podía fingir una nueva identidad.
Solo volvería a Gotham cuando logrará recuperar lo que perdió gracias al Joker, aquel inhumano desquiciado que le arrebato su vida y todo lo que conocía.
Sus pensamientos fueron interrumpidos de golpe al escuchar un grito, fijo su vista para encontrarse a una chica en un callejón, siendo asustada por un ladrón de poca monta.
No perdió su tiempo y estiró su látigo para poder aterrizar cerca de ellos, le hizo una señal de silencio a la chica para mantener la situación bajo control, para su suerte no dijo ni una palabra y así fue más fácil derribar al sujeto.
Lo sujeto a un poste inconciente y le devolvió el bolso a la chica, ella estaba algo asustada ya que no conocía a su salvador, no era Batman definitivamente, tampoco su fiel Robin.
¿Quién era él?
Sus preguntas fueron cortadas ante la repentina desaparición del más joven, quedó confundida pero no le dio mas vueltas al asunto y decidió salir corriendo de ese tenebroso lugar, definitivamente no volvería a ir de vacaciones a Gotham.
El chico corrió entre los edificios columpiandose con aquel látigo que se le había dado como regalo, finalmente llegó a una zona alta donde guardo sus pertenencias.
Saco una pequeña libreta y anoto lo que había hecho esa noche, nadie sabía lo que hacía los fines de semana cuando el pelirrojo estaba ocupado con Arrow.
No tenía planeado confesar las cosas que hacía, el siempre quiso ayudar a las personas pero ahora mismo no podía ejercer su carrera debido a la falta de título.
Quiso poner su granito de arena y ayudar de otras maneras, había escuchado de un justiciero de nombre Batman y su compañero Robin.
Decidió hacer lo mismo que ellos hacían, ayudar a la gente necesitada e indefensa.
La alarma en su reloj alertó que ya tenía que regresar a su hogar, bajo las escaleras de aquel edificio con agilidad y termino cayendo en una elegante pose encima de la moto.
Arranco a toda velocidad para regresar al apartamento antes de que Roy notara que no estaba ahí, tenía cuidado con controlar sus signos cardíacos para no preocupar a Harper.
