-¿Qué...?, No podemos divorciarnos ahora, Jeongin. No te daré el divorcio.
-Me importa una mierda, ya no quiero que seas mi esposo. Odio todo ésto.
-Jeongin.
Lo agarró del brazo.
-¿Qué? ¿Otra vez vas a manipularme?
-No.
-Sueltame.
-No lo voy a hacer. ¡No nos podemos divorciar así cómo así!
-¿Y qué vas a hacer? Tú solo provocaste ésto.
-Dime cómo lo hice.
-Empezaste con una actitud y un carácter de mierda, y después me abofeteabas cuando querías.
-¡Pero es que me hacías enojar! ¿Cómo querías que no me enojara?
-¡No tengo la culpa de eso! Tú iniciaste todo esto, no me interesa sí me gritas, me golpeas o me hagas lo que quieras. Me voy a divorciar de ti, sí o sí.
Changbin lo miró.
-No me importa, hagas lo que hagas, siempre serás mío.
Jeongin hizo una mueca.
-No, ya no. Ya no quiero seguir siendo a el que controlabas con un grito. Estoy harto.
-¡Tú me tienes harto a mi! ¡Siempre te quejas por todo y nunca estás conforme!, ¡Me hechas la culpa a mi por el simple hecho de que estás en cinta y te lastimas con todo! Me da exactamente igual, tú me tienes harto a mi.
-Y después te quejas de que no me darás el divorcio. Lo conseguiré igual. No me importa lo que tú quieras. Quizás te siga amando, pero no cómo antes...
-¿A qué te refieres, Jeongin?, No sigas con tus tonterías, sí te digo las cosas de está manera es por tu culpa.
-Me refiero a que ya no te amo cómo antes. Tú sólo me querías para satirfacerte y llenarte de sexo siempre. Desde que te enteraste de mi embarazo eres diferente... Pero me da igual, ya no quiero seguir a tu lado, el día de nuestra boda... Me juraste amor eterno, y ni siquiera te esforzaste por eso. Solo quiero estar lejos de ti, me gustaría haber seguido contigo, pero ésto ya no funcionó. No sé sí te enamoraste de alguien más, o solo era un capricho y todo fue una mentira... Mañana vendré por mis cosas. No sé sí alguna vez fui suficiente para ti... Pero ya no importa. Sí alguna vez me quisiste, quiero que sepas que nunca lo sentí.
-Pero tú me necesitas. ¿Cómo lo harás solo...?
-Yo era y siempre seré un adorno en tu vida, ahora tu lo eres en la mía. Yo me las arreglaré.
Jeongin se fue. Dejó a Changbin con un nudo en la garganta.
Lo dejó cómo Changbin alguna vez lo hizo con él después de abofetearlo o después de gritarle...
Debía aceptarlo, cagó todo con Jeongin. Ni siquiera sabía sí podría estar el día de su parto, o al menos ver al cachorro.
Aún recordaba ese día... Tan especial, el día de su boda fue la mejor parte de su vida... 30 de diciembre. Se emocionó mucho al imaginar todo lo lindo que pasaría con Jeongin después de que este aceptará casarse con él.
Sus lágrimas brotaron de sus ojos. Con furia tiró todo lo que estaba en uno de los muebles. Botó todo menos la foto en la que tenía a Jeongin. Rompió a llorar. Estaba devastado.
Soltó un grito de furia y tristeza. Se cortó con unos vidrios que cayeron del mueble, estaban rotos y trizados. Pero no sentía nada, aunque la sangre corriera por sus manos. Le dolía más perder al amor de su vida. Todas las veces que lo trató mal, lo empujaba, lo abofeteaba, le gritaba, lo insultaba, lo tiraba al suelo, le jalaba su pelo mientras solo lo llamaba inservible, como lo hacía llorar y sentirse mal, y por sí fuera poco, hacerlo sentir inseguro con su peso y físico... Se decepcionó de él mismo. Jeongin no le alzaba la voz ni mucho menos le gritaba, porque sabía que changbin podría dejarlo sangrando. Jeongin nunca le puso un dedo encima. Jeongin sí era suficientemente maduro para entender lo que pasaba, pero ahora no sabía controlarlo. Y él mismo se perdía en lo que changbin le decía. Por eso le llamaba inútil.
Le hizo daño durante años, y el rubio aún no se iba. Pero hasta que finalmente, llegó a su límite.
.·¡Lo siento, bin...! No volveré a gritarte, no me pegues más, por favor, me duele...·.
Una vez le dijo el rubio cuando lo trataba mal.
El sabía que no le hizo ni caso, le dió una bofetada que le hizo sangrar y caer al suelo, con lágrimas en sus ojos.
Talvez no lo supo apreciar como debía. Jeongin ya no estaba con él. Quería el divorcio... Solo le dolía y tenía un ardor en el corazón.
Y no, Jeongin no tenía razón. Changbin sí lo amaba, y no sólo por su cuerpo o por sexo. Tuvo una crisis de furia, por lo que se desquitaba con todos. Ya ni él sabía que era lo que pasaba consigo mismo.
Pasaron los días, ya era hora de firmar el divorcio.
Jeongin no se veía arrepentido, en cambio Changbin sí. Por él, le podía pedir perdón de rodillas. Pero era una mala idea. Aunque... Sabía que en un momento, Jeongin iba a sentir dolor como lo había sentido antes. Porque aún tenía la marca en su cuello. Y Changbin seguía siendo su alfa. No estaban casados, pero sí estaba el lazo. Y también, está no saldría hasta que pasará dos o un año.
...
🍼:cortito veves 🥰
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