El Prostíbulo De Los Youtubers Españoles (Rubius Hot +18)

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Se abre la puerta y entra el hombre de ojos verdes, junto a un hombre acuerpado y musculoso, cabello negro y barba.

-Vale tío, ve a arriba con tu tía. Yo me quedo aquí. – dice uno de los hombres.

El hombre de ojos verdes se acerca a mí, se sienta en mi cama y nota que por mi mirada, el temblar de mi cuerpo, la respiración acelerada y mis ojos hinchados por el llanto, estoy totalmente asustada.

-Venga, cálmate cariño, no te haré daño. – dice y me desposa de la cama y me alza, es imposible oponerme mis habilidades motoras están ausentes.

Mientras me carga y me dirige a un lugar desconocido, solo escucho los pequeños sollozos de las chicas que están siendo violadas por los otros hombres. Sube unas escaleras y abre una habitación amplia, paredes rojas, luz fluorescente, una cama doble con un enredón negro. Junto dos mesillas a cada lado, dos lámparas grandes y con estilo vanguardista. Mientras me recuesta en la cama, veo a la derecha un baño. En frente, una pantalla de Tv, última tecnología y dos torres de sonido.

Busca entre los cajones de la mesilla dos corbatas, amarra cada una mis muñecas a la cama. Toma suavemente mi cabello y lo recoge, un par de mechones y limpia mis ojos. Se quita la chaqueta de cuero, se retira las zapatillas y bota la camisa. Y desabrocha su cinturón.

Se sube encima de mí y besa suavemente mis labios mientras sus manos rozan mi culo y mi espalda. Me mira directo a los ojos, pasa su mirada por todo mi cuerpo. Desabrocha mi blusa y retira mi pantalón y zapatos.

Estoy ante él, atada a una cama, en bragas, la blusa desabrochada y mi brassier negro donde sobresalen mis pechos. Y que puedo hacer yo para oponerme... no puedo hacer nada. Putas drogas.

-No seré rudo, eres muy hermosa como para hacerte daño.- dice y comienza a besar mi cuello y sus manos rozan mi culo.

Me besa con lujuria, y a mí me está gustando. No lo puedo negar, este hijo de puta es muy guapo. Mierda, no puede gustarme. Pero sus labios y su lengua... están hipnotizando mi boca, y sus manos están encantando a mi cuerpo.

Sin darme cuenta le estoy siguiendo los besos. Abre suavemente mis piernas mientras me besa apasionadamente, baja mis bragas y se saca el pantalón y el bóxer. Comienza a recorrer mi pechos en medio de chupones y besos. Sigue bajando y llega a mi pelvis la muerde muy leve y llega a mi intimidad. Su lengua roza mi clítoris y sus dedos juegan un par de segundos antes de entrar, me está tentando. Entra y al parecer tiene experiencia, sabe cómo moverse en mi vientre haciendo que sienta placer. Saca sus dedos, abre mi boca y hace que los chupe.

Me besa de nuevo y no quiero que pare, me encanta sentir su lengua en mi boca, me encanta que toque todo mi cuerpo. Posiciona su miembro en mi intimidad y me penetra, su pene es muy grande es imposible no gemir, pero lo hago muy bajo.

-Te gusta guarra, gime más alto. – dice y me penetra más fuerte. Sus embestidas están siendo muy placenteras, a tal punto que me está haciendo llegar al orgasmo. El movimiento de su miembro y la fuerza con la que me penetra, es un sentimiento de dolor y placer pero la mezcla de estos dos hacen que sea embriagador, un éxtasis. Nuestras respiraciones están entrecortadas, la piel erizada y las pulsaciones aumentando cada vez más, esto me encanta. Y no para de penetrarme, lo hace más rápido y más fuerte.

- Quiero darte el mejor orgasmo de tu vida. ¿Estas lista? – dice.

- Si – respondo en un oasis de placer.

Me gira, estoy boca abajo y me sigue penetrando. Es excitante escuchar el choque de su pelvis con mi culo. Siento como mi pelvis está teniendo ciertas contracciones involuntarias, estoy llegando a mi clímax. Me penetra más fuertemente, y en un momento de euforia y placer desenfrenado siento como su miembro deja salir el semen que gotea alrededor de mis piernas. Continua penetrándome pero más despacio, haciendo que mi cuerpo descanse.