Él Ranker mas poderoso transmigra a la era interestelar

capítulo 24

~Gatitos~

Bajo el riguroso y casi infernal entrenamiento de Lee Yeon-Su, el día finalmente llegó a su fin, siendo las 7 P.M. La jornada había sido extenuante, con ejercicios que llevaban el cuerpo y la mente al límite. Todos los alumnos de las demás ramas iban hacia sus habitaciones con un aire de elegancia y dignidad, caminando con paso firme y seguro.

Pero la rama guerrera de los Shifterons era un completo caos. El cansancio se reflejaba en cada uno de ellos, sus cuerpos exhaustos tras un día de entrenamiento implacable. Incluso Violet, conocida como un alfa excepcional y respetada por su fuerza y resistencia, estaba agotada por el entrenamiento de Lee Yeon-Su. Este no tuvo compasión alguna, sin importar si eran alfa, beta u omega. ¡Incluso el profesor no se salvó de sentir que la muerte era preferible a seguir soportando el arduo entrenamiento!

Sin embargo, pese al extremo agotamiento, todos notaban cambios en sus cuerpos. Sentían la mejora en su fuerza, velocidad y resistencia, aunque fuera en pequeños incrementos. Todos compartían la misma duda: "Si seguían entrenando de esta manera, ¿cuán lejos podrían llegar?". Incluso Aldous, quien al principio no tenía muchas ganas de seguir el entrenamiento de Lee Yeon-Su, tuvo que admitir las mejoras evidentes.

Lee Yeon-Su, después de terminar su entrenamiento, salió primero del edificio. Corrió hacia la rama Alquimista con una determinación inquebrantable. En su mano llevaba un paraguas, y como si el cielo mismo estuviera en sintonía con el final de la jornada, comenzó a llover. Lee Yeon-Su esperó pacientemente en la entrada del edificio de alquimia, observando cómo las gotas de lluvia creaban charcos en el suelo.

Después de dos horas, finalmente salió Zephyr, acompañado de un chico de cabellos naranjas. Zephyr, sorprendido al ver a Lee Yeon-Su esperándolo bajo la lluvia, se acercó rápidamente.

-¿Sunbae?- Zephyr miró a Lee Yeon-Su con una mezcla de sorpresa y curiosidad.

-Hola- respondió Lee Yeon-Su con una sonrisa tranquila.

-Espera, ¿cuánto tiempo llevas esperando aquí? ¿Cómo te fue en la clase de Shifteron?- Zephyr lanzó varias preguntas seguidas, claramente preocupado.

-Solo diez minutos. Me fue regular en la clase de Shifteron- dijo Lee Yeon-Su mientras estiraba su mano, ofreciendo el paraguas a Zephyr.

Zephyr miró confundido el paraguas, sin entender por qué Lee Yeon-Su se lo ofrecía.

Eryk, el chico de cabellos naranjas, saludó a Lee Yeon-Su con ojos brillantes. Lee Yeon-Su asintió en reconocimiento.

-Está lloviendo, pensé en prestarte mi paraguas- dijo Lee Yeon-Su, anticipando la negativa de Zephyr, sabiendo que Zephyr vivía dentro de las instalaciones de la escuela, mientras que él vivía fuera.

Zephyr se iba a negar, consciente de que Lee Yeon-Su tendría que caminar bajo la lluvia sin protección, pero antes de que pudiera decir algo, Lee Yeon-Su le entregó el paraguas y se fue rápidamente, sin darle tiempo a rechazarlo.

Zephyr se quedó mirando atónito el paraguas en sus manos, incapaz de procesar la amabilidad repentina de Lee Yeon-Su.

-Bueno, por lo menos ahora no nos vamos a mojar- comentó Eryk sonriendo, tratando de aliviar la incomodidad de la situación.

Ambos, siendo omegas, vivían en el mismo edificio, a solo dos habitaciones de distancia. Compartían un vínculo especial por su condición y sus experiencias en la academia.

-Pe...pero, Le..Lee Yeon-Su....- Zephyr quería devolverle el paraguas a Lee Yeon-Su, preocupado por su bienestar. Sin embargo, al ver cómo este desaparecía de su vista, solo pudo suspirar resignado.