༻𝐴𝑚𝑜𝑟 𝑒𝑛 𝑎𝑙𝑡𝑎 𝑚𝑎𝑟 ༺

XI

— Dime Shadow. ¿Cómo es ser un pirata? — le pregunto uno de los invitados al azabache.

— Bueno, es divertido y agotador, tienes que dar órdenes y esas cosas, no todos hacen caso. — vio al cobalto quien solo rodó los ojos.

Su mirada se dirigió de reojo hacia la puerta donde entraban más personas, sus ojos se abrieron aún más al ver a cierta persona.

— Shadow.. — llamo pero este lo ignoro.

— También tienes que pelear sabes, necesitas dinero y eso no se encuentra en el agua.

— Shadow. — llamo dándole pequeños golpes en el brazo.

— ¿Que? No ves que estoy conversando.

— Every está aquí. — el azabache se sorprendió.

— Permítanme. — se alejaron. — No puede ser, enserio está aquí. ¿Pero cómo? — dijo asombrado al verlo.

Sonic se cruzó de brazos. — Si me pregunto cómo.. — vio al azabache.

— ¿No insinúas que fui yo, o si? — el cobalto frunció el ceño.

— Voy a decirle que se vaya. — se alejó de el.

— Espera, no puedes hacer eso.

— ¿Que es esto? Una boda o un funeral. — coloco una de sus manos en su cintura.

— Every. — llegaron ambos erizos.

— Pequeño Jules, hola.

— Disculpa, pero venía para decirte que te..!!! — el azabache lo callo colocando su mano en la boca del cobalto.

Rió nervioso. — Lo siento Every, ¿Nos das unos segundos? Gracias. — se alejó con el cobalto. — ¿Estas loco? — lo dejo ir.

— Si no se va arruinará el día de mi hermana.

— Si se va arruinará la vida de todos. — hablo entre dientes.

— Esto es tu culpa, seguro tu lo invitaste. — se cruzó de brazos.

— ¿Disculpa? ¿Olvidas que el me entrego la invitación?

— Es verdad... Quien le daría la invitación a el, en primer lugar no creo que mi hermana se la daría solo así.

— No importa, escucha solo guarda la calma, no puedes echarlo de la fiesta solo así, a menos de que quieras morir. Por mi parte no quiero, aún tengo mucho que hacer.

— Si hace un desastre voy a culpar te.

— Eso no es justo. — el cobalto frunció el ceño.

— ¡Shadow! ¿Ya viste quién está aquí? — el azabache suspiro.

— Si, Every. — el vetado de verde se sorprendió.

— ¿¡Every está aquí!?

— Grita lo más alto. — hablo el cobalto con sarcasmo.

— ¿Si no hablabas de Every, entonces de quien?

— Silver está aquí. — señaló; el albino se acercaba a Every.

— Oye Sonic, podría hablar contigo. — se acercó Sonia.

— ¿Que pasa?

— Hay personas extrañas en la fiesta, creo que ya lo notaste...

— No te preocupes, ahora mismo las sacaremos de aquí..

— No, en primer lugar esto es tu culpa. — la cobalta lo vio ofendida.