Capítulo 9

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El séptimo y último año en Hogwarts había llegado para Severus, Regulus y Lucius. Con el inicio del nuevo semestre, el castillo estaba cargado de una energía diferente, impregnada de anticipación y nostalgia. Para los tres amigos, era un tiempo de reflexión y preparación para lo que vendría después de la graduación.

A pesar de los desafíos que habían enfrentado el año anterior, su amistad se había fortalecido, y ahora estaban más unidos que nunca. Sin embargo, mientras se acercaban al final de su tiempo en Hogwarts, también enfrentaban la presión de tomar decisiones que determinarían el curso de sus vidas.

En una noche fría de enero, mientras la nieve caía suavemente afuera, Severus, Regulus y Lucius se encontraron reunidos en la Sala Común de Slytherin. La chimenea crepitaba, enviando destellos de luz danzante sobre las paredes de piedra, mientras los tres amigos compartían sus preocupaciones y esperanzas para el futuro.

"¿Pueden creer que solo nos quedan seis meses aquí?" dijo Lucius, su voz cargada de nostalgia. "Se siente como si el tiempo hubiera pasado volando".

Severus asintió, sumido en sus propios pensamientos. "Sí, es difícil de creer. Pero también significa que debemos comenzar a pensar en lo que haremos después de la graduación".

Regulus frunció el ceño, su expresión preocupada. "¿Y si no estamos listos? ¿Y si no sabemos qué hacer con nuestras vidas?"

Lucius puso una mano en el hombro de su amigo, ofreciéndole una sonrisa tranquilizadora. "No te preocupes, Regulus. Todos nos sentimos así en algún momento. Lo importante es que estamos juntos, y podemos apoyarnos mutuamente mientras navegamos por estas aguas desconocidas".

Severus asintió, reconociendo la verdad en las palabras de Lucius. A lo largo de los años, habían enfrentado desafíos juntos y habían salido más fuertes del otro lado. No había razón para creer que esta vez sería diferente.

"Supongo que tienes razón", dijo Regulus, su voz más tranquila ahora. "Solo tenemos que mantener la cabeza en alto y seguir adelante juntos".

Con esa determinación en mente, los tres amigos se sumergieron en una noche de estudio, enfocando su atención en los desafíos académicos que aún les esperaban antes de la graduación. Sin embargo, a medida que pasaban las semanas, la sombra del futuro continuaba acechándolos, recordándoles que pronto tendrían que enfrentarse a las decisiones que cambiarían el curso de sus vidas.

Fue durante una clase de Adivinación en febrero cuando el destino decidió intervenir una vez más en las vidas de Severus, Regulus y Lucius. La Profesora Trelawney había estado hablando sobre las predicciones del futuro cuando su mirada se posó repentinamente en los tres amigos, como si hubiera visto algo más allá de la superficie.

"Ustedes tres", dijo en voz baja, su voz llena de un tono misterioso. "Hay un destino que los une, un hilo que los conecta más allá de lo que pueden imaginar".

Severus, Regulus y Lucius intercambiaron miradas sorprendidas, preguntándose qué podría significar la enigmática predicción de la profesora. ¿Había algún significado más profundo detrás de sus palabras, o era simplemente el producto de su imaginación desbordante?

A medida que pasaban los días, la predicción de la Profesora Trelawney seguía resonando en sus mentes, llenándolos de una sensación de anticipación y ansiedad. ¿Qué destino los esperaba más allá de los muros de Hogwarts? ¿Y cómo afectaría eso el curso de sus vidas?

***

El Gran Comedor estaba adornado con los colores de las cuatro casas de Hogwarts, creando un ambiente festivo y emocionante. Los estudiantes llenaban las mesas, charlando animadamente mientras esperaban el comienzo de la ceremonia de graduación. Severus Snape caminaba por el salón, su corazón lleno de una mezcla de emociones. Por un lado, estaba emocionado por el final de su tiempo en Hogwarts y por las oportunidades que el futuro podría traer. Por otro lado, sentía una punzada de tristeza al despedirse de la escuela que había sido su hogar durante tantos años.

Mientras buscaba a sus amigos, Regulus Black y Lucius Malfoy, entre la multitud, su mente se llenó de recuerdos de los momentos que habían compartido juntos a lo largo de los años. Desde las travesuras en los pasillos del castillo hasta las noches de estudio en la Sala Común de Slytherin, habían sido inseparables. Ahora, mientras se acercaban al final de su tiempo en Hogwarts, Severus se preguntaba qué depararía el futuro para ellos.

Finalmente, vio a Lucius y Regulus al final del Gran Comedor, ambos vestidos con túnicas negras y plateadas, sus rostros iluminados por sonrisas nerviosas. Lucius sostenía un ramo de rosas blancas en una mano, mientras que Regulus llevaba dos ramos, uno para Severus y otro para Lucius. Severus sintió una oleada de curiosidad al ver las flores, preguntándose qué estaba pasando.

"¡Severus!" llamó Lucius, su voz llena de emoción. "¡Aquí estás!"

Severus se acercó, arqueando una ceja con curiosidad. "¿Qué está pasando?"

Regulus le entregó el ramo de flores, una sonrisa traviesa curvando sus labios. "Es un día especial, Severus. Y queremos que sea aún más especial contigo."

Severus frunció el ceño, confundido. "¿A qué te refieres?"

Lucius intercambió una mirada significativa con Regulus antes de tomar la palabra. "Severus, Regulus y yo hemos estado hablando, y hemos llegado a la conclusión de que hay algo que queremos pedirte."

Severus se quedó sin habla, sorprendido por la declaración de Lucius. ¿Qué podrían querer pedirle sus amigos en un día como este?

Regulus tomó una profunda bocanada de aire antes de continuar. "Severus, tú has sido un amigo leal y confiable para nosotros a lo largo de los años. Y nos dimos cuenta de que, bueno, no podemos imaginarnos el futuro sin ti a nuestro lado."

Severus miró de un amigo a otro, su mente girando mientras trataba de entender lo que estaban diciendo. ¿Estaban insinuando lo que pensaba que estaban insinuando?

Lucius asintió, leyendo la confusión en los ojos de Severus. "Lo que Regulus está tratando de decir es que... bueno, queremos que seas nuestro novio, Severus. Tanto él como yo."

Severus sintió como si el mundo se detuviera por un momento mientras procesaba las palabras de Lucius. ¿Sus amigos realmente le estaban pidiendo que fuera su novio a ambos? La idea era completamente inesperada, pero también emocionante de una manera que no podía explicar.

"Lo siento, ¿qué?" dijo Severus, luchando por encontrar las palabras adecuadas.

Regulus sonrió nerviosamente, extendiendo el segundo ramo de flores hacia Lucius. "Lucius, estas son para ti. Quería que fuera una sorpresa."

Lucius aceptó las flores con una mezcla de sorpresa y emoción, sus mejillas tomando un ligero tono rosado. "Regulus, no sé qué decir. Esto es... inesperado."

Regulus le tomó la mano, mirándolo con ternura. "Lucius, tú has sido una parte increíblemente importante de mi vida. Y no puedo imaginar enfrentar el futuro sin ti a mi lado."

Severus observaba la interacción entre sus amigos, sintiendo una oleada de calidez en su pecho. A pesar de la sorpresa inicial, la idea de estar en una relación con Lucius y Regulus no parecía tan descabellada como había pensado en un principio. Después de todo, habían sido inseparables durante años, y la idea de enfrentar el futuro juntos era tentadora.

"¿Y tú, Severus?" preguntó Lucius, volviendo su atención hacia él. "¿Qué dices?"

Severus miró a sus amigos, una sonrisa suave curvando sus labios. "Creo que... creo que estaría dispuesto a darle una oportunidad a esto."

Regulus y Lucius intercambiaron una mirada de alegría antes de rodearlo con un abrazo, llenándolo de una sensación de pertenencia y amor. A medida que se separaban, Severus se dio cuenta de que, sin importar lo que el futuro les deparara, siempre tendrían el uno al otro.

La ceremonia de graduación transcurrió con una mezcla de emoción y nostalgia mientras los estudiantes recibían sus diplomas y se despedían de Hogwarts. Para Severus, Regulus y Lucius, era el comienzo de una nueva aventura juntos, una en la que enfrentarían los desafíos del mundo mágico de la mano.

Mientras salían del Gran Comedor, el sol brillaba sobre el castillo, iluminando el camino hacia el futuro desconocido que les esperaba. Pero con el amor y el apoyo de sus amigos a su lado, Severus sabía que estaban listos para enfrentar cualquier cosa que el destino les deparara. Juntos, se dirigieron hacia el próximo capítulo de sus vidas, listos para enfrentar los desafíos y las aventuras que les esperaban con valentía y determinación.


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