Capítulo 20

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Julio

      Mi espalda cruje cuando me estiro sobre la silla, llevamos horas frente la computadora tratando de avanzar lo que más podamos de la tesis, estas vacaciones no van a ser unas vacaciones realmente ya que estamos entregadas a nuestra tesis y queremos aprovechar este mes para avanzar el trabajo de investigación y redacción, de esta forma al volver a clases nuestro profesor podrá corregir todo aquello que esté mal y podremos seguir avanzando de lo contrario no llegaremos a graduarnos en diciembre.

—Tengo hambre—Comentó a una Florencia que está tirada de espalda en el piso.

— ¿Tomamos mates?

—Flor, estamos a mates desde las cuatro de la mañana, quiero comida, además dentro de nada me tengo que ir a trabajar.

— ¿Pedimos algo?

El trabajo se ha vuelto agotador el último mes, mi cerebro está repleto de cosas, siento que las horas corren más rápido últimamente y no me alcanza el día para hacer todo, no ayuda que el colectivo vaya lleno y me apretujen mientras intento sostenerme de los asientos para no caer, no veo la hora de llegar a casa, estoy cansada y tengo hambre.

Son las cuatro de la mañana, acomodo mi espalda contra la pared mientras acaricio la mano de Jun, estamos esperando para concretar la video llamada con sus padres, estoy nerviosa, tanto que mi estomago no me deja en paz, Jun sale de mi habitación para contestar una llamada mientras miro la pantalla de su laptop, y caigo en cuenta que voy a conocer a sus padres, mil pensamientos me recorren, qué dirán cuando me conozcan, ¿están de acuerdo con nuestra relación?

Jun se sienta nuevamente a mi lado y dice que su padre no podrá unirse a la llamada ya que tuvo que quedarse en el trabajo, pero hablaremos con su madre, mi respiración se acelera, el momento llegó y mis nervios comienzan a alterarse aún más, él toma mi mano y dice que esté tranquila.

La pantalla se aclara y aparece en el monitor una mujer muy elegante, lleva el cabello recogido y un maquillaje ligero, la saludo con lo único en chino que aprendí a decir —Nǐ hǎo, Hěn gāoxìng jiàn dào nǐ. — después de la visita del primo de Jun, ella me responde con una sonrisa y sigue hablando con naturalidad, Jun traduce lo que su madre dice y le respondo.

En su rostro no desaparece en ningún momento la sonrisa y mi nervios se relajan, me pregunta cómo nos conocimos, la facultad y el trabajo, hablamos un buen rato hasta que nos despedimos de ella, es una mujer encantadora y estoy feliz que la llamada haya salido bien, nos quedamos viendo una serie hasta que el cansancio nos vence y dormimos.

Todavía no puedo creer que ya debemos volver a clase, el mes de vacaciones pasó demasiado rápido apenas y tuve la oportunidad de salir dos veces a cenar con Jun, ambos estamos agotados por el trabajo final pero nos extrañamos demasiado como para no darnos un tiempo para vernos, camino agarrada del brazo de Flor aunque en realidad me está arrastrando, no tengo ninguna ganas de ir a clase y pensaba saltarme las clases de hoy pero me obligo a salir de casa diciendo que no quería ir sola y ya tiene demasiados ausentes como para faltar hoy, objete diciendo que ese no era mi problema, ¿como yo si podía ir a clases cuando ella se le ocurre faltar? pero de nada sirvió, por lo que soy que arrastrada por el campus hasta nuestro edificio.

Al llegar al aula esta está bastante concurrida, a un costado del aula un grupo de alumnos discuten en voz bastante alta llamando la atención, como es de esperarse están discutiendo por su tesis y el trabajo que cada uno realiza, para mi sorpresa Pablo está entre los integrantes del grupo discutiendo a viva voz.

El profesor llega y calma el alboroto pidiendo que expliquen cuál es el motivo por el que pelea dentro del aula de esa manera, tres de ellos entre los que se encuentra Pablo aseguran que sus compañeros no trabajan sobre la investigación de la tesis haciendo para ellos el trabajo aún más pesado y aseguran que quieren eliminarlos del grupo, el profesor nos recuerda en general que a principio de año aclaró muy bien que debíamos elegir con cuidado a nuestros compañeros de tesis, argumenta que ahora no se puede hacer ese cambio deben seguir como grupo hasta finalizarla, este o el año que viene, lo que provoca que los tres chicos miren con rabia a sus dos compañeros que al parecer no trabajan en equipo, estos últimos no se definieron en ningún momento frente al profesor.

Tus ojos de GinkgoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora