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King veía con orgullo como todos los estudiantes que tenían su clase caían al suelo por el cansancio, al menos la mayoría.

— ¡Rob, te vas a quedar ahí media hora más!

— ¡Si señor!

— ¡Portgas, ponte dos más de peso y soportas esa misma media hora!

— ¡Si!

Esos mocosos de mierda habían demostrado ser bastardos que habían sido criados; por lo menos un año; por Monkey D. Garp porque su resistencia era una burla para el ser humano común. Cuando vio a Portgas tastabillar un poco en la plancha y a Lucci casi tropezar con sus propios pies después de una hora sonrió.

— Vayan a bañarse—. King les dijo, todos los que habían estado en el suelo muriendo; incluyendo a los dos con resistencia sobre-humana; suspiraron de alivio.

Lucci tuvo que ser ayudado por Kaku ya que no podía volver a levantarse por el cansancio que estaba experimentando, su amigo se burló un poco de él por eso antes de ayudarlo a levantarse; sin embargo; sujeto el brazo quemado de Rob, fue solo un fragmento en que fue expresado ese dolor, pero fue lo suficiente para que Kaku lo soltará y tomara el brazo sano.

— ¿Quieres que te lleve a la enfermería?—. Kaku preguntó, siempre en voz baja para que solo Lucci lo escuchará—. ¿Qué fue esta vez?

— No paso nada—. Rob respondió a su amigo—. Solo es un dolor por un calambre.

— ¿Pasa algo?—. King se había acercado lo suficiente a ellos para revisar a Lucci—. Si te sientes mal ve a la enfermería, si Marco está ahí no tendrá un problema en revisarte.

— Estoy bien señor, solo fue un calambre.

— Entonces váyanse a las duchas, se que ahora tienen clase con el cínico de Crocus.

Ambos asistieron y sin hacer muchos más comentarios se fueron hacia las duchas.

***

Lucci agradeció que las duchas estuvieran vacías y que solo Kaku lo estaba acompañando. Con la confianza de que solo su mejor amigo estaba observándolo, se quitó la playera de manga larga blanca que llevaba debajo de la del uniforme dejando ver la quemadura de su brazo derecho y como aún estaba roja.

— Lucci—. Kaku tenía de nuevo ese rostro, ese rostro de impotencia y rabia—. ¿Qué fue?

— Crema de cebolla, la lave y trate con crema—. Respondió—. Desaparecerá en una semana, pero aún arde y duele.

— ¿Pica?

— A veces—. Lucci respondió y entró a la ducha, sabía que Kaku cuidaría la puerta para que nadie viera las cicatrices en su cuerpo.

En especial la insignia del gobierno mundial hecha por cicatrices  de quemaduras y golpes en su espalda. Por más que quiso relacionar sus pesadillas, temores, ataques de pánico o cualquier tipo de trauma; no lo logro.

Esa herida; de tortura; estaba relacionada fuertemente con el mejor recuerdo de su vida, con la única persona que lo trato como un niño herido en un hospital militar y no como un soldado psicópata: Donquixote Rosintante.

El hombre estaba ahí también por una herida de la guerra, nunca supo que era; además de que no podía ser demasiado grave si estaba moviéndose de un lado a otro en la enfermería; Rosinante siempre estaba ayudando a las enfermeras y médicos aún que estos lo reprendieran por estar de pie.

Ese hombre había cuidado con tanta gentileza la herida de su espalda que cada vez que pasaba no podía evitar llorar; siempre pensaron que era porque el dolor era insoportable, pero el realmente no soportaba o no lograba gestionar completamente el que alguien lo tratará de manera tan linda.

¡Esto Es Guerra! [ONE PIECE]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora