un mundo distinto

¿perdida de memoria?

Hinata se levantó temprano y, antes de que alguna otra ninja médico se acercara a ver cómo estaban Naruto y Sasuke, entró silenciosamente en su habitación. Al ver que ambos estaban despiertos, una sonrisa se dibujó en su rostro mientras se acercaba a ellos.

"¿Cómo se encuentran?" preguntó, sentándose enfrente de las dos camillas. "Supongo que aún hay dolor, ¿verdad?" Hinata se levantó y se dirigió primero a Naruto, quien parecía estar más despierto. "Curaré tus heridas por si aún tienes algunas," dijo, reuniendo su chakra. Tras examinar a Naruto, se dirigió a Sasuke para hacer lo mismo.

Una vez que los dos estuvieron completamente despiertos, Hinata pudo examinarlos con más detalle. "Algunas de sus heridas tardarán en sanar, así que tendrán que quedarse aquí un tiempo," les informó con seriedad. "Lo más probable es que necesiten una o dos semanas para recuperarse por completo."

"¿Qué se supone que haremos cuando alguien venga a visitarnos?" preguntó Sasuke con voz adolorida. "¿Debemos fingir no recordar nada?"

"Por el momento no recibirán visitas," dijo Hinata, mirándolo directamente a los ojos. "Informaré que los dos han perdido la memoria y que posiblemente no sea tan grave. Y que con el tiempo, es probable que logren recuperar sus recuerdos," sentenció, tomando algunas notas en su cuaderno médico antes de levantarse. "Bien, en una hora vendré a verlos chicos." Se levantó y salió de la habitación, dejándolos descansar por unos momentos.

Mientras Hinata caminaba por el pasillo, se encontró con Sakura, quien ya estaba despierta y visiblemente preocupada. "¡Hinata!" gritó Sakura al verla salir del cuarto. "Qué bueno que te veo. ¿Podrías decirme cómo se encuentra Naruto? " Su voz tenía un tono de urgencia que hizo que Hinata se sintiera un poco nerviosa.

"No te preocupes, Sakura. Necesito hacer unas cuantas cosas más y te mantendré informada," sonrió Hinata, tratando de transmitir tranquilidad a su amiga, aunque no pudo evitar sentir una creciente preocupación por el paradero de su esposo y amigo. "Por el momento, no se pueden hacer visitas. Lo siento, Sakura."

Sakura bajó la cabeza, claramente preocupada. "Entiendo. Yo esperaré," murmuró, su voz cargada de ansiedad.

Hinata le puso una mano en el hombro, tratando de ofrecerle consuelo. "Ve a casa, Sakura. Lo más probable es que no puedas verlos hoy," dijo con una mueca de disculpa. "Te aseguro que pronto estarán bien. Te lo prometo."

Sakura asintió, aunque sus ojos reflejaban la lucha interna entre la necesidad de quedarse y su confianza en Hinata. "Gracias, Hinata. Sé que están en buenas manos contigo."

Sakura asintió y, sin más que hacer en el hospital, se marchó a su casa en espera de noticias. Mientras tanto, Hinata se dirigió a informar sobre la pérdida de memoria de Naruto y Sasuke a los demás médicos. Llegó a la sala de reuniones donde los médicos, visiblemente preocupados, comenzaron a discutir y planificar los chequeos necesarios para evaluar si la situación era crítica.

Ino, quien se encontraba entre los médicos, se acercó a Hinata con una expresión de preocupación. "Debe ser muy difícil para ti, ¿verdad?" preguntó, tomándola suavemente por los hombros. "Y no lo digo solo porque es tu marido quien perdió la memoria, sino también porque tuviste que verlo en ese estado tan crítico."

Hinata bajó la cabeza, sintiendo el peso de las palabras de Ino. "No te preocupes," continuó Ino, tratando de reconfortarla. "Han salido de peores situaciones, así que solo será cuestión de tiempo."

"Sí, sé que esto será pasajero," respondió Hinata, sonriendo agradecida por el apoyo de su amiga. "Aunque no debo flaquear. Mi marido sigue aquí internado, así que será mejor que me ponga a trabajar," añadió con determinación, dándose la vuelta para retomar sus tareas. Luego, como si de repente recordara algo, se giró de nuevo hacia Ino con una sonrisa más ligera. "Aunque creo que un café no nos haría mal. ¿Quieres venir?"