El Fantasma: Rastros de un Crimen

Capitulo 5

- Ecos de la Verdad -

Pueblo Fjellstrand, Noruega

El amanecer en Fjellstrand pintaba el cielo con tonos dorados y rosados, reflejándose en las tranquilas aguas de los fiordos. Era un lugar encantador, conocido por sus playas serenas y sus vistas impresionantes, pero esta belleza matutina contrastaba con la gravedad de la investigación de Alexander.

Una pequeña pista encontrada en un diario había llevado al detective hasta allí. Entre las páginas llenas de notas y observaciones, un nombre sobresalía: Øyvind Johansen. Alexander había seguido este rastro hasta el remoto pueblo, buscando a un hombre que parecía ser la clave para resolver el caso.

Øyvind Johansen, un antiguo vecino de la familia de la víctima y ex jardinero de su casa, se había mantenido oculto del mundo durante años. Desde que presenció algo crucial relacionado con el asesino en el pasado, había recibido constantes amenazas de muerte, lo que lo llevó a un acto desesperado: cortarse la lengua para no recibir más advertencias. Ahora, se comunicaba solo a través de notas escritas.

Alexander encontró a Johansen en una pequeña cabaña, alejada de la vista. El ambiente en el interior era sombrío, reflejo de la angustia y el miedo que habían marcado su vida. Johansen, un hombre de mediana edad con ojos cansados, le pasó una hoja con letras apresuradamente escritas.

"Estoy seguro de que vi al asesino, sucedió durante un evento trágico de la familia: un incendio que destruyó su casa hace 20 años. Por eso se mudaron a donde viven ahora. Siempre he sospechado que ese incendio no fue accidental y que el asesino estuvo involucrado. Yo lo vi, al menos de espaldas, pero lo hice. Y estoy seguro de que alguien normal no se quedaría viendo cómo se incendia una casa desde afuera"

Alexander leyó la nota con atención, el peso de las palabras cayendo sobre él. Miró a Johansen, buscando más respuestas en sus ojos llenos de dolor.

—Lo que me dices fue muy desastroso. ¿Hubo algún muerto en tal incendio? —preguntó Alexander, sintiendo que la verdad estaba cerca pero aún fuera de su alcance.

Johansen asintió, comenzando a escribir otra vez. Le pasó un nuevo trozo de papel.

"El incendio fue muy trágico y hubo varias muertes, pero la que más sufrió fue la señora Eleanor. La madre de la señorita Emma perdió a su hermano, el joven Einar Halvorsen en ese incendio. No tengo idea de quién pudo haber matado a la joven, pero el asesino podría ser alguien que busca venganza por lo ocurrido durante el incendio, tal vez culpando a la familia por la muerte de un ser querido. Lo siento eso es todo lo que puedo decirle espero ser de ayuda."

Alexander sintió un nudo en el estómago al leer estas palabras. La conexión entre el asesino y el trágico incendio de hace dos décadas abría nuevas posibilidades y complicaba aún más el caso. ¿Podría el asesino estar actuando por venganza? ¿O había algo más profundo y oscuro detrás de estos crímenes?

La conversación terminó, dejando más preguntas que respuestas. Alexander agradeció a Johansen y salió de la cabaña, el aire frío de la mañana llenando sus pulmones. Mientras se alejaba, no podía dejar de pensar en el incendio y en las vidas destrozadas por él. La imagen de las llamas devorando la casa y la figura solitaria observando desde la distancia lo perseguía. Sabía que debía encontrar a esa persona antes de que más vidas se perdieran en el fuego de la venganza.

Con determinación renovada, Alexander se dirigió hacia la fábrica, sabiendo que cada detalle, por pequeño que fuera, podía ser la clave para resolver el misterio.