Control y diversión

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Al llegar a la escuela Anya vio a Becky y la fue a saludar, ellas hablaron sobre estudiar para los próximos exámenes que se venían antes de pasar al siguiente curso. En el camino, se encontraron con Damian, Emile e Ewan; al verlos Anya les grito.

- Funcionó lo que ustedes me dijeron sobre los poderes de Anya- la reacción de sus amigos fue quedarse pasmados. Anya rápidamente leyó sus mentes.- me refiero a que juegue con mis papis y ellos reaccionaron como ustedes dijeron. - Ella se sintió un poco avergonzada cuando Emile e Ewan se aguantaron la risa, Becky los ignoró y Damian la tomó de la mano cuando vio que casi derramó una lagrima.

-"No puedo decirles que puedo leerles las mentes, y tengo que aguantar las burlas"- escucho Damian cuando la toco pero le estaba mirando la cara aunque ella miraba hacia el suelo, y ella no había movido los labios, lo habría jurado. No escuchó nada más y se la llevó al salón de clases.

- Enana ¿ estás bien?- le preguntó tratando de no parecer preocupado

-Shi, estoy acostumbrada, siempre se burlan- dijo con una sonrisa- pero ahora somos amigos, duele un poco más ¿ tu no te ríes de mi Menor?

- ¿por qué lo haría? siempre inventas cosas, tienes una imaginación privilegiada supongo.- sin darle mayor importancia.

Hubo un silencio y Anya comenzó a leer la mente de Damian. Entonces se dio cuenta de dos cosas, primero: que podía traspasar pensamientos pequeños y segundo: su padre estaba infiltrado y era el profesor de matemáticas justo en ese momento mirándola con una cara de lo peor por no estar poniendo atención. 

Luego de la clase, no percibió a su padre pero sabia que podría estar cerca, pero tenia que hablar con Damian y aprovecharía que habían quedado de estudiar. Aparecieron Ewan y Emile para disculparse por burlarse, Anya acepto las disculpas pero no entendió porque Damian estaba tan involucrado en el tema (mientras leía la mente de los dos). Al final, no pudo hablar con Damian sobre lo sucedido, y pensó que si dejaba el tema era mejor así para su familia.


Al llegar a casa, estudio un poco con Loid, le contó una de las historias que le había contado a Loid luego del hospital, era como armar un puzzle que ahora estaba completo y a pesar que a veces salían unos retos y frases de desaprobación o preocupación, casi todo terminaba en risas por las coincidencias y como era que al final todos habían salido airosos de sus tareas, trabajando juntos pero sin hacerlo.

- Papi dame tu mano- dijo Anya, a lo que él respondió dándosela de manera curiosa pero seguro de lo que su hija quería mostrarle. Ella respiró encontró el momento y la emoción de ese momento. Y le mostró el momento que lo conoció, cuando la raptaron y él la salvo.

- ¿Qué fue eso? - dijo sorprendido- ¿estás aprendiendo a controlarlo?¿sola?

-Shi, mis amigos en la escuela me dieron unas ideas cuando jugábamos a los poderes, pero tengo que practicar mucho o se me puede salir algo.. - dijo con una cara de problemas.

- Ayy no no me digas que otra vez te pasó- dijo Loid 

- Shi, pero solo me escucho llorar.

- ¿Alguien te hizo llorar en la escuela?- pregunto Yor 

- Fue mi culpa por hablar de más mami, no importa Menor y Becky me cuidan- los padres se miraron y sonrieron.

-Esta bien que practiques Anya- dice Loid- a mi me parece una buena idea pero ten cuidado porque debes protegerte, nosotros lo haremos a cualquier costo, pero tu debes ayudarnos, así que tal vez deberías tratar de minimizar el contacto con las personas y practicar en casa.-las miro - ¿Qué opinan?

-A mi me parece que es lo mas correcto, además te servirá para practicar agilidad sii?!- le dijo Yor con una sonrisa.

-Oki Doki- dijo Anya con una mano en la frente.

Luego de eso Anya le pidió la mano a Yor y le mostró la historia de los pingüinos y  algo de eso le causó tanta risa que después de un rato los otros tres integrantes de la familia se preocuparon... si que son bien raros



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