Peligrosa Tentación

Capitulo 9.-Un juramento de amor.

-Carajo Scarlet¿Para eso me pedías exclusividad?.-Dijo mientras azotaba la puerta para cerrarla y evitar que fueran descubiertos.

-No, deja que te explique lo que pasó.

-Primero pídele a tu amiga que se retire.

Scarlet miro a la señorita Park, solo para confirmar que ella se estaba vistiendo, arregló su ropa y se dispuso a retirarse, antes hizo reverencia frente a Jk y después solo salió, cerro la puerta pero permaneció ahi para escuchar.

-Vístete, no quiero verte así y menos después de haberte encontrado con ella así.

-Lo nuestro no significó nada.

-Te la cogiste, claro que significó algo.

-No, te amo a ti ella solo fue una aventura.

-Ya no importa lo nuestro se terminó, no puedo confiar en ti.

Scarlett había terminado de vestirse lo miro con el rabillo del ojo y con lágrimas en los ojos frente a él se tragó todo su orgullo y todas las mentiras que estaba a punto de decir solo para que él no la dejara.

-Perdóname juro que haré lo que quieras, No me abandones por favor.

-No-Dijo con tu mirada indiferente y distante.

-Juro que haré lo que me pidas, pero no me abandones.

-Scarlett ya entiende que lo nuestro nunca va a poder ser, Jamás voy a dejar de ser tu empleado y además Min no nos dejará el camino libre.

-Min ya dejó de ser un problema para nosotros, aceptó que seamos solo amigos.

-Eso ahora es lo de menos, tienes a tu amante y ya te satisface y no te niega nada.

-Pero ella no me importa, me importas tú, quiero estar contigo, Te amo a ti, te deseo a ti, lucharía contra todos por ti.

-Si así fuera no te habrías cogido a tu amante.

-No es mi amante, deja de mencionarla y te dije que no me importa.

-Entonces promete una cosa.

-Lo que tú me pidas.

-Hagamos un juramento de amor.

-Si, tu pon las condiciones que quieras.

-No voy a dejarte a cambio de que no pidas sexo por 3 meses, las muestras de amor serán cuando y como yo quiera, vas a defenderme de Min ante todo y por último te queda prohibido buscar a tu amante de nuevo.

-Si todo lo que tú pidas.

-Aguanta estos tres meses y seré tuyo para siempre, formalizarse lo nuestro y te pediré matrimonio.

-Lo haré, por favor no me dejes. .

-No lo haré si cumples.

Jeon sabía cómo castigarla, sus armas eran poderosas y a la vez sabía que no podía resistir tanto tiempo. Sin embargo, era la forma más segura de probar si ese amor que le juraba era honesto o solo se basaba en el sexo.No podía pensar en algo distinto considerando que a Scarlet le había sido tan fácil cambiarlo solo por sexo, está vez había sido ella, después podía ser Min.

-Levantate y vamos a casa.

Scarlet tomo sus cosas y ambos fueron directo a la camioneta, subieron, Jeon condujo directo a casa y por primera vez el camino fue incómodo, ninguno abrió la boca en todo el camino, además ambos iban llorando.

Al llegar a casa Scarlet bajo y espero en la puerta, deseaba que como cada noche el se bajara y se despidiera. Esta vez no fue así, arranco y se fue. Ella no pudo más con eso y se dejó caer de rodillas, lloraba amargamente por haberle fallado a él.

Jeon apenas había avanzado unas cuadras y no pudo evitar regresarse, tenía que regresar y verla, tenerla entre sus brazos y consolarla. No podía perdonarse haberla hecho llorar, a el también le dolía lo que había pasado, aunque se sentía culpable porque él había provocado eso con su juego, dejarla con las ganas había sido su peor error.

Salió de la camioneta y regreso corriendo a casa de Scarlet, no quería verla llorar y no quería negarle nada, había entendido al fin que la amaba, que ya no importaban los errores el estaría con ella incondicionalmente.

Corrió y corrió hasta llegar donde estaba Scarlet, freno de inmediato cuando la vio de rodillas llorando, apretando los puños y triste, no se contuvo más y la abrazo, con sus enormes brazos la apretó fuerte y la contuvo, poco a poco dejo de llorar.

-Perdoname.

-Tu perdoname a mi, no debí estar con ella, no debí fallarte por una tontería como el sexo.

-Olvidalo, te perdono sin condiciones y sin juramento.

-Quiero hacerlo, haremos un juramento de amor y por tres meses cumpliré con todas tus condiciones.

-No, eso ya no importa solo quiero estar contigo.

-Si es lo que quieres entonces hagamos este juramento de amor.

-De acuerdo. -Acepto aunque no por gusto.

Ambos había jurado algo y en ese instante fue sincero y por lealtad. Entonces juntos todo parecía posible.

Entraron a casa, se dieron un pequeño beso y después de sentarse en el sillón se abrazaron y estuvieron asi hasta quedarse dormidos