22|Revocar

1.2K 109 10
                                    

CAPÍTULO VEINTIDÓS

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

CAPÍTULO VEINTIDÓS.
revocar

°

—Con permiso —Gloria se abrió paso, entrando al despacho del director—. Aquí está la señorita D'Amico.

—Muchas gracias, Gloria —agradeció el Director Dunoff, por lo que, acto seguido, Gloria procedió a retirarse de la oficina, dejándonos a Dunoff y a mí a solas—. Seré lo más breve posible, Señorita D'Amico.

—Estoy completamente de acuerdo, pero antes me gustaría pedirle algo —quería aclarar el tema del cambio de habitaciones lo más pronto posible.

—¿Qué es eso que me quiere pedir, Señorita D'Amico? —preguntó tomando asiento en su escritorio.

—Quiero que revoque el cambio de habitaciones entre la alumna Luna Fernández y yo —hablé sin pelos en la lengua, no permitiría que Luna cayera en manos de Natalia, aún tenía muchos asuntos pendientes con la que había sido mejor amiga—. Quiero regresar a mi habitación, si no es mucha molestia, con Pilar y Natalia.

—Mire, que coincidencia que toqué ese tema —lo observé extrañada—, porque es justamente esa razón por la que mandé a llamarla —tomo unas carpetas apilándolas a un lado de su escritorio—. Debido a su mentira, he tomado la decisión de ser yo quien revoque su petición sobre su cambio de habitación.

—¿Eso era de lo que quería hablarme? —pregunté divertida—. Bueno, estoy completamente de acuerdo con la decisión, ¿Luna está enterada de esta noticia?

—No, primero quería hablar con usted, aunque no creí que aceptaría tan pronto mi decisión o que usted sería la primera en pedírmelo —estaba desconcertado, claro que creía que haría un alboroto por esto, cuando la realidad era lo que había estado buscando desde el principio.

—¿Puedo decírselo? —pregunté emocionada.

—No veo por qué no —gesticulo con un amargo sabor de boca, él realmente quería darme un castigo, en otras circunstancias, la antigua yo, no hubiera protestado, pero esta nueva yo sí que lo hubiera hecho, de no ser porque todo esto resultaba beneficioso para mí.

—¿Eso es todo? Me perdí todas las clases del primer día de clases, no quiero que me pongan amonestaciones los profesores.

—No se preocupe, sus maestros están enterados de su situación, por esta ocasión no se le darán amonestaciones —sonreí satisfecha, lo último que quería era que mi padre me castigará por recibir mi primera amonestación.

—Gracias, Director Dunoff, con su permiso —me levanté de mi asiento, saliendo de su oficina.

Decidí saltarme otra clase para hacer el cambio de habitación yo misma, mi maleta estaba intacta, no había sacado nada de su interior, por lo que entre a la habitación de Marizza y Luján, sacando la maleta debajo de la cama.

rebel girl ↯ rebelde wayDonde viven las historias. Descúbrelo ahora