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COSQUILLEO
play espresso by sabrina c.



Minho era un chico bastante sencillo. Las cosas que lo ponían feliz eran simples, como comer, dormir, jugar voleibol, hablar con su hermano o pasar tiempo con su novia. Es por eso que la mayoría de personas pensaban conocerlo, porque era alguien transparente y con gustos sencillos. Muchos lo llamaban básico, pero él se consideraba alguien simple de entender.

Pero quizá por eso, por lo que todos pensaban conocerlo realmente, es que todos se tomaban la libertad de opinar abiertamente sobre él y su relación. Y eso a Min Minho no le gustaba en lo absoluto.

En aquel momento se encontraba sacando el libro de literatura de su casillero, intentando ignorar que todos se encontraban hablando de su supuesta ruptura con Miyeon, y que casi todos parecían contentos por aquello. Él entendía que quizá ambos discutían seguido, y la mayoría de veces lo hacían en la escuela, sin embargo, no entendía por qué todos tenían la necesidad de esparcir rumores sobre si terminaron o no.

Suspiró y cerró su casillero, dispuesto a regresar a su salón, cuando sintió un par de manos cubrir sus ojos. Reconoció quién era de inmediato, aquel perfume de vainilla y lo sedoso de las manos solo podía pertenecer a su novia.

—Te extrañé mucho.—Miyeon besó la mejilla de su novio, descubriendo sus ojos. 

Minho dio media vuelta y le sonrió a Miyeon, sintiéndose ligeramente avergonzado por la muestra de afecto.

—Nos vimos solo hace unas horas, linda.—Minho la abrazó por la cintura.

—Es demasiado tiempo sin mi lindo novio.—susurró la chica antes de ponerse de puntitas y besar los labios de Minho.—¿Escuchaste los rumores?

Min asintió con la cabeza.—¿Cómo no hacerlo? Parece que es de lo único que pueden hablar todos.

Miyeon rio ligeramente, acariciando el cabello negro de su novio. Minho se relajó un poco ante el tacto, disfrutaba de esos tratos de parte de su novia.

—Apuesto a que todos se han de estar revolcando al ver que seguimos juntos.—susurró Miyeon antes de besar nuevamente a Minho.

El chico rio un poco en el beso, abrazando más fuerte a su novia por la cintura. Su momento romántico se vio interrumpido cuando escucharon una tos a las espaldas de la chica. Ambos se separaron, y Minho miró a Yoongi. Su hermano les dio una ligera mirada de asco, ganandose una risa por parte de Miyeon.

—Consiganse un cuarto.—murmuró Yoongi.—Yo ya me voy, te vas caminando a casa.

Minho se mostró ligeramente confundido, hasta que recordó que su hermano tenía fisioterapia a esa hora. 

—Vale, con cuidado al conducir.

El mayor de los Min solo asintió antes de girarse y caminar hacia la salida. Minho regresó su atención a su novia, que solo lo miraba con una ligera sonrisa.

—¿Qué pasó?

—Te ves muy guapo.—dijo antes de besarlo nuevamente.—Tengo algebra ahora. ¿Nos vemos a la salida?

Minho asintió, sin dejar de sonreír tontamente por el reciente cumplido de su novia. Sin más, Miyeon se alejó del chico. Minho sacudió la cabeza, riendo un poco por la interacción con su novia, hablar con ella lo ponía de buen humor.

Caminó tranquilamente hasta su salón y sin conversar con nadie se sentó en su asiento. Hanni se encontraba revisando su teléfono cuando miró al chico, arrugando un poco la cara al hacerlo.

—Limpiate.

Minho la miró, ligeramente confundido.

—Tienes labial en la mejilla y en los labios. Limpiate.—murmuró ligeramente asqueada.

Minho sacó su teléfono de su bolsillo y abrió la cámara. Un calor en las mejillas apareció en el momento en el que vio que estaba manchado con labial, tanto en su mejilla como en sus labios. Suspiró, Miyeon lo había hecho a próposito porque sabía que Hanni lo vería. Y también agradeció internamente que no lo haya besado en el cuello.

Minho buscó algo con qué limpiarse en su bolso, sin embargo, no tenía nada. Miró a Hanni, que solo suspiró antes de sacar de su bolso un paquete de paños húmedos. 

—No te los gastes todos.—dijo Pham con voz neutral.

—Gracias Hanni, eres la mejor.—sonrió Minho mientras sacaba dos paños húmedos y se empezaba a limpiar. Después de un rato miró a Hanni, que solo seguía viendo su teléfono.—¿Ya?

Pham lo miró, riendo un poco al notar que el labial de su mejilla solo se había corrido más. La chica tomó otro paño húmedo y se acercó a Minho, limpiando con delicadeza su mejilla. El chico respiró profundamente ante la repentina cercanía con Pham. Era la primera vez que se encontraban así de cerca, y pudo detallar más el rostro pálido y suave de la chica. También sintió el olor de su perfume, no lo reconocía bien, solo era muy dulce. También sintió las suaves manos de Hanni agarrar su rostro mientras lo limpiaba, y sintió un extraño cosquilleo en el rostro y en el estómago.

—Listo. Guapo como siempre.—Hanni le sonrió de forma coqueta, recobrando esa personalidad que parecía apagada.

Minho rio un poco, nervioso por el coqueteo y la cercanía con la chica.

—Gracias Hanni, otra vez.—Minho le sonrió. Una sonrisa genuina que solían escaparsele cuando hablaba con la chica.





THE BOY IS MINE.―hanni pham.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora