THE BOY IS MINE.―hanni pham.

v.

CELOS
play new magic wand by tyler, the creator.

La clase favorita de Hanni siempre había sido educación física, desde pequeña lo decretó, cuando entendió que en educación física solo se hacían juegos o competencias. Sin embargo, desde que entró a la secundaria, la clase le gusta más que nada por una simple razón, los chicos. 

Ver a los chicos jugando basquet, gritando y haciendo ejercicio siempre le había gustado a Pham. Aunque Minji muchas veces le había dicho que aquello era asqueroso, Hanni tan solo decía que era un gusto culposo.

Sin embargo, aquel día Hanni le estaba prestando poca atención a los chicos que jugaban y su vista estaba fija en cierta persona. Que por desgracia, no estaba solo. Por alguna razón, la clase de Cho Miyeon se había cancelado, y en aquel momento se encontraba hablando con Minho en las gradas. Y Hanni no podía despegar la mirada de ambos.

—Si sigues mirando así Cho se dará cuenta.—Minji le advirtió.

—¿Mirando cómo?

Minji despegó la mirada de su libro y miró a su amiga.

—Te comes con los ojos a Min y luego miras a Cho como si quisieras matarla.—explicó sin más, para luego regresar a su libro.

—No me estoy comiendo con los ojos a Minho...—Hanni soltó una risita.—Es solo que...esa camisilla resalta sus brazos. Además, hago eso con todos los chicos en educación física.

—Lo haces cuando están jugando y sudando. Min lleva media hora allí de pie, coqueteando con su novia.

Hanni solo bufó y volvió a mirar hacia ellos. Miyeon acariciaba los brazos expuestos de Minho, mientras él solo le sonreía y hablaba. Hanni frunció ligeramente el ceño, viendo como Miyeon se mordía los labios descarademente. Generalmente acostumbraba a no ver las interacciones entre ambos, ya que con solo ver a Miyeon sentía naúseas. Sin embargo, no podía evitar ver a Minho. Aquel día se veía diferente, más atractivo a la vista de Pham.

Aunque en realidad no tenía nada diferente al resto de días, su cabello estaba peinado igual, las perforaciones en sus orejas seguían allí, y no tenía nada diferente en el rostro. Sin embargo, era quizá la forma en la que miraba a Miyeon, o la forma en la que agarraba su muñeca mientras apretaba la mandibula, que lo hacían ver inusualmente más atractivo. 

Pero Miyeon si que le dañaba la vista. Aún así, continuaba mirando. Y sin notarlo, estaba haciendo contacto visual con Minho. Hanni sintió que sus mejillas se calentaban, y la mirada de Minho pareció suavizarse un momento. Sin embargo, el momento duró poco y se acabó en el momento en el que Miyeon notó el contacto visual.

Y lo siguiente que Hanni vio fue a Miyeon besando descaradamente a Minho. En cuanto se separaron, la chica abrazó a su novio y se escondió en su pecho sin dejar de hacer contacto visual con Hanni y soltando una risa descarada de por medio.

Hanni rodó los ojos antes de mirar a Minji, frunciendo un poco el ceño. Su amiga solo negó con la cabeza, como siempre, tuvo razón.

—¡Señorita Cho y señor Min!—la maestra les llamó la atención.—¡Este no es lugar para tales afectos!

Pham no pudó evitar reír un poco mientras escuchaba como ambos se despedían, para luego escuchar los tacones de Miyeon chocar apresuradamente contra el piso, y finalmente escuchar la puerta siendo abierta.

Miró nuevamente hacia donde Minho se encontraba, el chico la estaba mirando. Hanni iba a sonreírle, sin embargo, Minho apartó la mirada antes de caminar hacia donde su grupo de amigos se encontraba.

—Él tiene novia.

Hanni miró confundida a su amiga.

—No te hagas la tonta. Te gusta Min.

—No me gusta.—Hanni se rio.—Solo es divertido coquetearle para molestar a Miyeon.

—Parece que Miyeon hace lo mismo.—Minji dejó de lado su libro, dispuesta a explicarle su punto a su amiga.—Ella no es tan estúpida cómo tú crees, Hanni. Ese beso que le dio, arriesgándose a que les llamen la atención, lo hizo para joderte. Y parece que funcionó porque te estás muriendo de celos.

Hanni soltó una carcajada, empujando a Minji de manera juguetona. Sin embargo, al notar que su amiga no se reía, se detuvo.

—¿Hablas enserio?—Minji asintió.—No estoy celosa, y mucho menos de Miyeon.

Minji tan solo suspiró. Su maestra dio por terminada la clase, y los chicos empezaron a recoger los balones que usaron. Ambas dirigieron su mirada a Minho, que ayudaba a recoger algunos balones.

—Lo que digas. Pero te recuerdo...—Minji recogió su libro y se puso de pie, dispuesta a irse al salón.—Él tiene novia, Hanni. Y su novia es Cho Miyeon, ¿estás segura de que quieres meterte en ese lío?