El viento aúlla con una furia incontrolable, arrastrando consigo el lamento de la tragedia que ha envuelto a la Federación Unida. Una lluvia de plomo ha castigado sin piedad la tierra, dejando a su paso un paisaje desolador y desgarrador. Ruinas que antes fueron hogares, familias destrozadas y el llanto desgarrador de los más inocentes se entrelazan en un coro de angustia y desolación.
En medio de este escenario apocalíptico, un joven se alza erguido junto a una de las ruinas, su mirada reflejando una mezcla de ira y desesperación que hiela el alma. Con voz temblorosa, pronuncia maldiciones contra aquellos que han arrebatado todo lo que amaba a su amada patria. En lo más profundo de su ser arde el fuego de la venganza, pero también la semilla de la esperanza, mientras se cuestiona si alguna vez podrá hallar la paz en un mundo desgarrado por la crueldad de la guerra.
A los quince años, Erick Romanov se encontraba inmerso en un mundo marcado por la brutalidad y la desolación de una guerra interminable. La pérdida de su madre a la temprana edad de siete años dejó una profunda cicatriz en su corazón, una herida que solo se alimentaba con el resentimiento que su padre cultivaba en él hacia aquellos que representaban el lado opuesto de la moneda en ese conflicto devastador.
En medio de lágrimas y susurros cargados de angustia, Erick se cuestionaba el peso que debían soportar antes de que la pesadilla llegara a su fin. Anhelaba un mundo donde reinara la paz, donde las heridas de la guerra pudieran sanar y las sombras del pasado se desvanecieran ante un futuro lleno de esperanza y redención.
A pesar de su anhelo por la paz, la sed de venganza se apoderaba cada vez más de su ser. La memoria de su madre clamaba por justicia, ¿cómo podía quedarse de brazos cruzados? Entrenado desde pequeño por su padre para servir a la Federación Unida, el reclutamiento de jóvenes para reforzar las filas militares llegó en un momento crucial. Con lágrimas en los ojos, Erick se enfrentó a la dualidad de la venganza y el deber, preparándose para el destino que le aguardaba en el campo de batalla.
La determinación de Erick no vacilaba ante el horror de la batalla; su mente estaba completamente enfocada en la búsqueda de justicia para su madre. A medida que los cañonazos resonaban y el olor a pólvora impregnaba el aire, divisó a su padre en la distancia. La visión de su figura, erguida en medio del caos, encendió en Erick una chispa de esperanza y urgencia. No pudo contenerse y, con el corazón latiendo con fuerza, corrió hacia él, ansioso por unirse al ejército y buscar la venganza que tanto anhelaba.
"¡Padre! ¡Aquí estoy!" gritó, su voz cargada de desesperación y resolución.
Su padre, sorprendido por la inesperada aparición de su hijo, se acercó con paso firme pero lleno de confusión. "¿Erick? ¿Dónde has estado todo este tiempo, hijo mío?"
"Eso no importa ahora, padre. Lo lamento profundamente. Pero por favor, dime, ¿dónde debo ir para unirme al ejército?" inquirió Erick con una determinación inquebrantable, sus ojos reflejando una mezcla de dolor y fervor.
El rostro de su padre se suavizó, mostrando una mezcla de orgullo y preocupación. Observó a su hijo con detenimiento, notando la madurez y el sufrimiento en sus ojos. Con un gesto lleno de ternura y solemnidad, le tocó el hombro.
"Claro, hijo. Entiendo tu deseo y tu necesidad de luchar por nuestra causa. Vamos juntos," dijo su padre, su voz impregnada de una mezcla de solemnidad y afecto.
Erick sintió un nudo en la garganta mientras seguía a su padre, consciente de que este momento marcaba el inicio de un nuevo capítulo en su vida, uno lleno de desafíos y sacrificios. A medida que avanzaban juntos hacia el frente, las palabras de su padre resonaban en su mente, fortaleciendo su resolución. Sabía que la lucha que tenía por delante no sería fácil, pero estaba preparado para enfrentar cualquier adversidad con el objetivo de honrar la memoria de su madre y proteger a aquellos que amaba.
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Sombras de Guerra: La Guerra de las garras
FantasyEn un continente dividido por diferencias políticas y territoriales, la guerra fría entre la Federación Unida y Nortchland se despliega como un telón de tragedia. Estas dos naciones, pilares del oeste, se enfrentan con pensamientos políticos radical...