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Vino / interlude

Al día siguiente, la familia se levantó temprano y se preparó para la excursión al viñedo. Había un ambiente de emoción y anticipación mientras se alistaban.

Tía: (con entusiasmo) ¡Listos para una nueva aventura, chicos!

Léo: (sonriendo) Sí, tía. No puedo esperar a ver el viñedo.

Rémi: (asintiendo) ¡Será interesante ver cómo se hace el vino!

Madre de Léo: (riendo) Y también podremos probar algunas uvas. Escuché que son deliciosas.

Todos subieron al auto y comenzaron el viaje hacia el viñedo. El camino estaba lleno de paisajes pintorescos, con colinas verdes y viñedos que se extendían hasta donde alcanzaba la vista. Llegaron al viñedo y fueron recibidos por un guía amable que les mostró las instalaciones y les explicó el proceso de elaboración del vino.

Guía: (señalando los viñedos) Aquí es donde empieza todo. Estas son nuestras uvas, que cosechamos a mano durante la vendimia.

Léo: (interesado) ¿Cuánto tiempo lleva producir una botella de vino?

Guía: (sonriendo) Puede llevar desde unos meses hasta varios años, dependiendo del tipo de vino. Después de la cosecha, las uvas se fermentan y el vino se envejece en barricas.

Rémi: (fascinado) Es increíble cuánto trabajo se necesita para hacer una botella de vino.

Después del recorrido, la familia tuvo la oportunidad de degustar algunas variedades de vino. Léo y Rémi disfrutaron especialmente de la experiencia, probando diferentes sabores y aprendiendo sobre las características de cada vino.

Padre de Léo: (relajado) Esto es realmente agradable. Gracias por sugerirlo, chicos.

Léo: (feliz) Me alegra que lo estés disfrutando, papá.

Pasaron la tarde explorando los viñedos y disfrutando del hermoso paisaje. Al final del día, regresaron a la casa de la tía, cansados pero felices por haber compartido una experiencia tan enriquecedora.

Tía: (sonriendo) ¿Qué les pareció la visita al viñedo?

Léo: (entusiasmado) ¡Fue genial! Aprendimos mucho y la degustación fue divertida.

Rémi: (asintiendo) Sí, definitivamente fue una experiencia única.

Madre de Léo: (mirando a Léo y Rémi) Me alegra que todos hayan disfrutado. Mañana podríamos hacer algo más relajado, como un picnic junto al río.

Padre de Léo: (concordando) Suena perfecto. Será bueno pasar un día tranquilo juntos.

La familia se relajó y disfrutó de una cena casera, compartiendo historias y riendo juntos. Léo y Rémi se sintieron más unidos que nunca, agradecidos por el apoyo de la familia y emocionados por las aventuras que aún les esperaban.