✿Capítulo 4❀

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Un liviano brazo apretándome logró despertarme de mi sueño, no tardé en abrir mis ojos y girarme a ver al culpable durmiendo con la boca abierta y babeando mi almohada, se le veía tranquilo y aquello me alegraba. No había sido la mejor de las noches y por eso mi pequeño hermano estaba durmiendo a mi lado.

Sonreí enternecida y dejé unas leves caricias en su cabeza, cuidando de no despertarlo. Me fue imposible no mirarlo por unos segundos más, notando lo parecido que era a mi madre, desde su pelo hasta los gestos, su sonrisa y sus ojitos.

Bostecé una última vez antes de apagar la alarma, no queriendo despertar al pequeño a mi lado, y una vez me sentí más despierta me levanté para asearme y prepararme para ir a la academia.

Sonreí entretenida al recordar como anoche mi hermano llegó a mi pieza con una manta y el kunai de mamá, preguntando si podía dormir conmigo.

"No me gusta cuando no está mamá en la aldea", soltó en voz baja y con una mueca inquieta.

Cada vez que mamá salía de la aldea, que no eran muchas, mi pequeño hermano venía a mi pieza a dormir conmigo.

"Sabes que nunca te diré que no, bobo". Mi respuesta era obvia, mi cama siempre estaría disponible para él.

Recuerdo que mamá siempre reía al recordar que cuando no se sentía bien iba a dormir con tío Shikamaru, tío Shikamaru siempre la dejaba hacer lo que quería y siempre adoré esa relación de hermandad que tenían ambos.

Una vez estuve lista me acerqué a mi durmiente hermano y besé su frente, dejándolo dormir, aunque ni siquiera se movió así que eso significa que está en el quinto sueño y no va a despertar hasta la tarde o hasta que papá lo levante.

A veces lo envidio.

En cuanto puse un pie fuera de mi cuarto, sentí un delicioso aroma que hizo gruñir a mi estómago.

Papá está cocinando.

Papá es el que se encarga de todo en casa, especialmente cuando mamá no está.

"Es imposible que tu madre se quede quieta en un lugar, si no está en movimiento me preocupa", eso dijo una vez cuando le pregunté por ella y si no le molestaba que mamá fuera la que estaba más tiempo fuera de casa.

Papá es más tranquilo, le gusta estar en casa o salir solo cuando es necesario. No le interesa mucho el salir a hacer misiones porque dice que nosotros somos su prioridad.

"Cuando ustedes nacieron, el mundo me dio una misión y esa es cuidarlos y amarlos por el resto de mi vida"

A veces papá es bastante expresivo, aunque es probable que haya aprendido de mamá, porque ella dice que a él siempre le costó decir las cosas. 

"Tu padre es más de acción que de palabras", cada vez que decía eso, tenía una gran sonrisa en su rostro.

Cuando llegué al comedor lo vi llevando un par de platos y no dudé en acercarme a él y abrazarlo con fuerza.

— Buenos días. — Saludó el adulto con una suave sonrisa, no parecía sorprendido por mi repentino abrazo. — ¿Cómo dormiste?

Imité su sonrisa y respondí sin soltarlo. — Bien, ¿y tu, padre?, ¿extrañar a mamá te dejó dormir? — Molesté sabiendo que, al igual que nosotros, su noche se hacía larga cuando mamá no estaba.

Papá rió mientras asentía. — Siempre extraño a tu madre y siempre me hace falta tenerla a mi lado a la hora de dormir. — Soltó con total sinceridad, sacándome una sonrisa enternecida.

— Entonces somos tres, — bromee con una suave sonrisa. — Tadao fue temprano a mi habitación para preguntarme si podía dormir conmigo. — Comenté con un tono dulce al recordarlo. — A pesar de que mamá llegue tarde a casa, ya cuando estamos dormidos, sabemos que está en la aldea. Así que cuando sale todo se siente mucho más solitario. — Me sinceré sin soltar mis brazos de su torso.

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⏰ Última actualización: Oct 11 ⏰

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Senju |Nara Shikadai|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora