五条先生、お父さんですか！？ [ SATORU GOJO X LECTORA ]

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T/n acomodó un poco su cuerpo en el sofá , disfrutando del silencio que abarcaba no solo la sala de descanso; sino también toda la estructura. Con el sonido relajante del viento y los pájaros, así como alguno que otro grito lejano de ciertos estudiantes practicando; pero no era algo que realmente le molestara.

—— Kei, no te asomes mucho por la ventana —— advirtió sin la necesidad de abrir sus ojos. Con tan solo apuntarlo con su dedo índice el menor se mostró aburrido; apretando sus pequeños labios, ocasionando que sus mejillas enrojecieran y se abultaran.

Con cuidado bajó de la silla que había colocado como escalón y caminó hasta su progenitora, sentándose entre sus piernas y recostarse por igual; imitando a su madre.

Ambos permanecieron en silencio, permitiendo que la brisa fría ingresara a la habitación y los relajara.
Disfrutaban de la calma, tanto así que conciliaban el sueño con facilidad.
—— No.

Nuevamente, la voz de la pelirroja resonó en la habitación. Kei Abrió sus ojos con intriga y la miró, esperando a que ella abriera sus ojos y le diera un porqué había dicho “ No”. Su respuesta estaba en la puerta, con la misma abierta y en una esquina se asomaba cierto albino.

Kei volvió a imitarla y cerró sus ojos una vez más, aparentando no haber cruzado miradas con el sujeto. —— ¿No la escuchaste?—— Cuestionó con indiferencia —— Pierdete anciano.

—— ¿En serio? —— satoru sonrió confiado, mostrándose presente al interior de la habitación; dando pasos suaves y lentos mientras intentaba esconder un empaquetado de aparentemente dulces. —— Y yo que quería darte estos dulces ... Kei-cha-...

—— no los quiero, vete.

Un fuerte golpe llegó a su pecho, exageradamente llevando su mano sobre dicha área para abrir sus labios con sorpresa , soltando con un tono de ofensa un —— ¡Pero... ¡Kei! ¿Acaso no éramos cercanos ya?——.

—— ¿Desde cuándo?.

Incluso su tono de voz era una punzada más que llegaba a su pecho ¿Había sido solo cosa de un solo día? Se sentía dolido por el claro rechazo que estaba recibiendo y sobre todo, que T/n no parecía querer hacer algo al respecto, solo se reía mientras intentaba ocultarse con su mano.

—— ¡Kei! —— chilló, sentándose de una forma exagerada en uno de los asientos disponibles. Mirando fijamente al menor ; que también lo desafiaba.

Lo analizó fijamente, lo mismo hacía el pelirrojo a su parecer. Sin duda era un copia exacta de él, la forma tan incómoda del como lo miraba le recordaba a sus momentos de seriedad.
El color azul que penetraban los suyos a través de su banda le hacía bufar y sonreír con orgullo al pensar “ ahora entiendo cómo se siente mi mirada sobre otros ” .
Sin admitirlo , confesaba que amaba esas pestañas pelirrojas que adornaban sobre sus orbes azules, podía jurar que había alguno que otro con su característico color albino pero quizás era su imaginación.

—— Dime kei-chan —— llamó con seguridad. Próximamente a señalar su ojo cubierto para indicarle los suyos —— ¿Ves diferente?.

—— ¿Diferente?—— se cuestionó así mismo—— ¿ A qué te refieres? .

—— Mhm... Seis ojos negado... podría ser....—— murmuró para si mismo, como si estuviera tachando una parte de una lista mental.

T/n lo miró con mala gana, esa mirada que el propio Kei solía darle cuando intentaba defenderla; era una digna mirada de muerte que sólo T/n podía hacer.

Sonrió de forma involuntaria, mirando ahora a la pelirroja y la forma en como su rostro estaba formado. Era hermosa ante sus ojos, incluso estando molesta.