𝗊𝗎𝗂𝗇𝖼𝖾.

158 27 20
                                    

"Will we ever learn?, we've been here before"
3/4

𓆝

Ya habían pasado tres días desde la cita entre ambos chicos y no sabían si era porque habían estado juntos todo el día del sábado o simplemente porque conocían los sentimientos del otro, pero se podía notar el cambio entre ellos dos, sutiles miradas por los pasillos y guiños, al igual que ahora se saludaban cuando se veían y se quedaban conversando. Eran pequeños cambios que los amigos de ambos habían podido notar y no se habían oprimido en preguntar sobre ello, claro que ninguno de los dos dijo algo sobre el tema, no porque les diera vergüenza, sino porque no creían necesario aclarar su relación, la gente podía pensar lo que quisiera y les daba igual.

A Jungwon le importaba en parte lo que opinaban sus amigos más cercanos, eran importantes para el y no quería ocultar algo tan importante como su reciente acercamiento a Sunghoon, más que nada porque ya había ocultado por bastante tiempo su enamoramiento, quería poder hablar con alguien sobre el tema, emocionarse al decirle a los demás lo mucho que le gustaba y las cosas lindas que le decía o hacia por el.

Park por otra parte seguía pensando lo mismo, le daba igual si la gente sabía o no, le tenía cariño a sus amigos, pero era una persona reservada y ellos lo sabían, además, el monstruo en su interior le impedía hablarles de Jungwon, quería mantenerlo para el mismo, no como un secreto, sino como algo privado suyo, que apreciaba y adoraba. Ya llegaría el momento en que pudiera decir que el pelinegro y él estaban juntos, tal vez cuando se fueran a casar.

Su sonrisa se hizo aún más grande al ver por la ventana al dueño de sus pensamientos. Se encontraba en su uniforme de porrista practicando con las demás chicas en el equipo. Aquello de alguna manera se sintió como un déjà vu.
Y como siempre, Jungwon se veía precioso moviendo su cuerpo al ritmo de la música, dejándose llevar por la coreografía y marcando cada paso tan perfectamente, que fue inevitable no quedarse mirándolo.

—Sunghoon, hace tiempo que estoy pensando en esto, ¿te gusta Jungwon? —Dejó de mirar al porrista y se dio la vuelta para ver a su amigo castaño. En su rostro se podía notar la sorpresa por escuchar aquello, ¿era tan obvio?

— ¿Qué mierda estás diciendo?, ¿por qué me gustaría Jungwon? —Se apoyó en el respaldo de la silla y cruzó sus brazos queriendo verse desinteresado ante el tema, no quería que Heeseung se diera cuenta de lo nervioso que estaba.

—Es solo que siempre te quedas mirándolo y últimamente se les ve más juntos.

—Nos hemos acercado más, pero no me gusta. —No le estaba gustando hacia donde la conversación se estaba dirigido, era peligroso y tenía la sensación de que terminaría diciendo algo que no sentia.

—Sé que no te cae bien, ¿entonces por qué le hablas? —Hubo un silencio por unos segundos en lo que lo único que se podía oír entre ambos amigos eran los ruidos de sus compañeros en la sala hablando o riéndose.

—No hay una razón, Heeseung.

— ¿De verdad no te gusta o atrae?

—Joder, ¿por qué tanta insistencia en saber? —Miró a su amigo molesto y antes de poder pensar bien sus palabras, dijo algo por lo que se arrepintió al segundo de terminar de decirlo. —Jungwon no me gusta, jamás me podría gustar alguien como él.

Heeseung no comento más del tema lo que restaba de receso y Sunghoon lo único que podía pensar era en lo estúpido que había sido, ¿por qué simplemente no le dijo que le gustaba Jungwon?, el castaño era alguien de su confianza, lo conocía desde los trece años y desde ese momento han sido amigos.
Maldecía su orgullo, si no fuera tan orgulloso podría haber sido sincero, no quería tratar al pelinegro como alguien cualquiera, era el chico que le gustaba, por el cual moriría por solo verlo sonreír.

Cuando se decidió a decirle la verdad a Heeseung, este ya no estaba, se había ido apenas la campana había sonado.

Ya tendría tiempo para confesarle la verdad, no pasaría nada si esperaba unas horas más.

ෂ ෂ ෂ

—Es un insoportable, joder.

— ¿Quién?

—Sunghoon, es insoportable a veces. —Heeseung miró al porrista con ojitos de cachorrito y tomó sus manos entre las suyas propias. —wonie, desde ahora serás mi único amigo, que se vaya a la mierda ese gruñón. —El lindo pelinegro soltó unas risas y solo asintió a lo que su amigo decía del chico que le gustaba. Sabía muy bien que Park podía llegar a ser insufrible a veces (la mayor parte del tiempo), así que entendía a Lee.

— ¿Qué te dijo ahora?

—Le pregunté si gustaba de ti, ya sabes, últimamente se les ve a los dos más cercanos, además en sus instagram publican cosas de parejas, entonces pensé que el chico que subía eras tú, tienen un parecido. —El corazón de Jungwon comenzó a latir más rápido y sus mejillas se enrojecieron, ¿habían sido tan obvios?

— ¿Y qué te dijo? —En su mente, creció la posiblidad de Sunghoon diciéndole a Heeseung sobre ellos dos, tal vez de una manera algo brusca, pero se lo había dicho y eso no hizo más que emocionarlo.

— ¡Dijo que no!, ¡dijo que a él jamás le podría gustar alguien como tú! —El castaño se cruzó de brazos ofendidos y siguió hablando sin notar el cambio en el rostro de Jungwon. —Es un imbécil, ese cara de hongo, no te merece, no, jamás podrá estar contigo, no con esa personalidad de mierda que se carga.

El porrista había dejado de escuchar lo que decía su amigo, lo único que se repetía en su mente una y otra vez era:

"Jamás le podría gustar alguien como tú."

¿Alguien como él?, ¿cómo era alguien como él?, no lo comprendía. Sabía que Sunghoon era alguien reservado y no solía ir comentando sobre su vida privada a los demás, ni a sus amigos, lo entendía y por lo mismo jamás lo obligaría a nada que no quisiera, ¿pero por qué había dicho algo como eso?

¿Sunghoon le había mentido?, ¿todo lo que habían pasado era una mentira?

De solo pensar en que Sunghoon había jugado con el y sus sentimientos provocó que su pecho se apretará y sus ojos se inundarán en lágrimas, aquello siendo notado por Heeseung y con preocupación se acercó a él.

— ¿Qué pasa, Won?, ¿por qué lloras? —Y solo tuvieron que pasar unos minutos para que el castaño pudiera conectar todo en su mente y darse cuenta de lo que sucedía. —Wonie, ¿te gusta Sunghoon? —No necesitó que este le respondiera para saber la respuesta, y se arrepintió de inmediato por haber dicho aquello.

Heeseung no dijo nada, solo abrazó a su amigo y se mantuvo así por más de diez minutos, sin hablar, solo manteniéndose junto a Jungwon, sosteniéndolo entre sus brazos escuchando sus sollozos y sintiendo como su camisa se mojaba por las lágrimas.

— ¿Jungwon?

Y ahí estaba, la persona por la cual el porrista se encontraba llorando con el corazón hecho pedazos, mirándolo preocupado.

¿Qué mierda había pasado?

Sunghoon sin pensarlo mucho se arrodilló frente a Jungwon y lo separó del castaño, tomando su rostro entre sus manos y le dolió tanto lo que vió.

Los preciosos ojos del pelinegro estaban enrojecidos por el llanto, al igual que sus mejillas y nariz, se veía hermoso, no iba a mentir, pero al verlo de esa manera, llorando y estando tan vulnerable lo hacía sentir de una forma desagradable, le gustaba más el Jungwon feliz, no quería verlo triste nunca, el pelinegro merecía ser feliz siempre.

— ¿Qué sucede, cariño? —Con sus pulgares limpio el camino de lágrimas que había en su rostro para después acunar su mejilla en una de sus manos.

—Ya no tienes que fingir, Sunghoon.

— ¿Fingir?, ¿de qué estás hablando?

—Le dijiste a Heeseung que jamás te gustaría alguien como yo.

Y en ese momento, al ver a Jungwon tan desolado y lastimado lo supo.

Sunghoon supo que había arruinado todo de nuevo.

𓆝

hombres

(♡) › 𝗄𝗂𝗅𝗅 𝗆𝗒 𝗍𝗂𝗆𝖾. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora