Deal - Annyeongz

#4

# ➳ Wonyoung POV

El silencio incómodo que reinaba en el auto fue roto por las palabras de mi padre.

PA: Te vas a casar.

En ese momento sentí como si me hubieran tirado un balde de agua fría.

WY: ¿Qué?
WY: ¿Ca-sarme?!
WY: ¿Con quién?

Mi corazón comenzó a latir con fuerza, y cada segundo que pasaba, sentía que el pecho se me apretaba más y más.

TA: Con la estúpida hija de la familia An.
TA: An Yujin. Ya está todo arreglado.
TA: Y antes de que te quejes, debes saber que es la única forma de saldar nuestra deuda.

Tomé bastante aire antes de responderle. Ya no me sentía nerviosa, sino estaba a punto de explotar.

WY: ¿Qué clase de deuda puede ser tan grande como para sacrificar a tu propia hija?

TA: Una que no se puede solucionar con dinero.

Esas palabras eran, simplemente, lo último que quería escuchar.

Ya no tenía fuerzas para seguir peleando, así que me hundí en el asiento. Nadie podría entender lo horrible que se siente ser usada como una simple transacción. Y por tus propios padres.

Miré por la ventana, viendo cómo las luces de la carretera se cruzaban, perturbando aún más mis pensamientos. Con cada kilómetro que avanzábamos, veía cómo la vida que había soñado se desvanecía.

WY: ¿Por q-qué yo...?

PA: Porque no le podemos hacer esto a Jennie.

MA: Ve el lado positivo hija, por fin tendrás una buena amiga que te acompañará el resto de tu vida.

Tras decir eso, el auto se detuvo frente a la imponente mansión de los An. Respiré hondo, intentando calmarme y, a la vez, prepararme para lo que se venía.

De repente, las puertas se abrieron y fui recibida por una multitud de personal en la entrada. Nos guíaron hasta el salón donde se llevaría a cabo la cena, pero con cada paso que daba, no podía evitar pensar que me acercaba más a un futuro desconocido y fuera de mi control.

Antes de entrar, me detuve un segundo para arreglarme el cabello frente a un gran espejo que se encontraba en la mitad del pasillo.

En el momento que crucé la puerta del comedor, comprendí que mi vida estaba a punto de dar un giro de 180 grados. Realmente no sabía qué esperar, pero estaba decidida a no rendirme.

Me encontré con los rostros desconocidos de la familia An, pero mi futura esposa no parecía estar por ningún lado. Hasta que la puerta opuesta se abrió y la mismísima An Yujin hizo su entrada. Era de mi misma altura y parecía bastante segura de sí misma. Aunque era evidente que, al igual que yo, me estaba evaluando con curiosidad y apostaría que con cierto desagrado.

Nos sentaron frente a frente, mientras que nuestros padres ocupaban los extremos de la mesa.

El silencio inicial fue roto por las formales palabras de bienvenida y agradecimiento de los mayores. Parecía que nuestros padres llevaban tiempo conociéndose, pero ¿por qué nunca me habían traído hasta aquí antes?

YJ: Así que... esta es la persona con la que me casaré.

An Yujin soltó esas palabras de repente, con un tono cargado de ironía mientras dirigía una mirada desafiante hacia su padre. No iba a quedarme de brazos cruzados, así que, impulsada por la hostilidad del momento, recogí fuerzas para responderle.