Cambiastes mi infierno por un Paraíso

El Blanco se mancha de rojo

Era un lindo día, las calles tranquilas, el ambiente fresco y cálido.

Poka estaba en camino para llegar a la escuela, junto a ella llevaba su guitarra acústica la cual después de conversar con su nuevo amigo le diría que la llevaría para tocar algo.

Era curioso que después de dos semanas de haberse conocido Poka ya lo consideraba su amigo, la compañía de Akatsuki le era genial y relajante, aunque durante esas dos semanas cesaron un poco las burlas hacia ella.

Quiso experimentar un poco hacia ese tema en particular, durante la primera semana de haberlo conocido camino sola en los terrenos de la secundaria ella se tropezaba con alguna piedra o hoyo en el suelo y vería como los estudiantes en el área soltaban una lluvia de burlas e insultos contra ella.

En cambio, la segunda semana camino junto con Akatsuki en los mismos espacios y también se tropezaba, su compañía hacia cesar las burlas. Aunque exactamente no podía decir que era por Akatsuki que nadie se burlaba de ella, talvez después de la primer semana ellos ya no le vieron sentido seguir burlarse de ella.

(Nota: Aquí todos sabemos que era por Akatsuki que ellos no se burlaban).

POV: POKA.

Mére hoy le enseñaré mi modo de tocar la guitarra a mi amigo del que les conté, estoy un poco nerviosa no sé si le gustará o si yo misma me sabotee con las notas...podrías...-El auto frenó bruscamente y no pude seguir, al recuperarme del freno pude sentir como una mirada enfadada me miraba, al subir la cabeza pude ver que era mi madre.

Mamá: ¡Será que puedes cerrar tu maldita boca! ¡Tengo cosas más importantes por las que preocuparme que escucharte a ti.-No sabía si su enfado era a causa de mi o era por algo más.

Mamá: Además, enserio crees que ese chico Akat...no se que, siquiera le importe tu tonta guitarra, el solo es amable contigo por simple y mera pena, que no se te olvide, nadie en este mundo le agradan las personas con problemas mentales o físicos, ¡El solo está contigo por lastima!.-Gire mi rostro hacia la ventana.

Sus palabras me dolieron pero algo dentro de mi hacia que no me creyera esas palabras, algo tenia por sentado, Akatsuki era un dulce y hermosa persona, eso lo podia saber al tocar su rostro.

Mientras observaba el vacío a través de la ventana, mamá volvia a encender el motor. El sonido de las llaves tintineando me alertaba mientras mamá se iba irritando, esto no era buena señal. Comenzó a golpear el volante, destrozándolo con gritos que me hacían temblar hasta el fondo.

Las lágrimas se acumulaban en mis ojos muertos, yo intentaba suprimirlas a toda costa; secandolas repetidamente con las mangas de mi suéter.

Mamá: ¡Mira lo que hicistes! ¡Por haberme detenido para hablar, ¡Me hicistes romper el maldito auto de tu padre! Tenías que ser tú, perra ciega, desgraciada. ¡Si pudiera te devolveria a ese maldito orfanato hoy mismo!.- El orfanato no quiero...porfavor no ahí...ahí no quiero volver.

Mamá: No siquiera pude llegar a la mitad del camino de mi trabaj, ¿Cómo demonios voy a llegar a tiempo? ¿¡Eh!? ¡Respondeme maldita perra ciega!.

Pe-Perdóname mére vo-voy et-j'irai pour vois (y voy a ir a) ...

Mamá: ¡Deja de hablar en francés! ¿Quien te crees que eres? ¡Adopté a una hija estadounidense! Si dices una palabra más en francés, te partire la boca a bofetadas. Lo juro por Dios, Poka. -Su voz cada vez se notaba más irritada y eso no traía nada bueno.