13. TRAIDORA

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Peaches se sentó en su apartamento, rodeada de los documentos que había recolectado.

Su mente estaba en un torbellino de emociones: amor, traición, miedo y determinación.

El hombre al que había amado hasta la obsesión, en quien había confiado, era un traidor.

Max había usado su carisma y posición para manipular a todos, y ahora dependía de ella revelar la verdad.

Con lágrimas rodando por sus mejillas, Peaches reflexionó sobre su próximo movimiento.

Necesitaba exponer a Max, pero también debía proteger a la ciudad del caos que él había desencadenado.

Sabía que Max no se quedaría de brazos cruzados. Decidió que lo mejor era reunir a sus aliados más cercanos y planear una estrategia.

En las sombras, Max no perdía el tiempo.

Comenzó a desacreditar a Peaches públicamente, pintándola como una traidora y una bruja.

Utilizó su influencia para difundir rumores sobre ella, creando una imagen de alguien peligrosa y desequilibrada.

Los medios de comunicación, bajo su control, replicaban estas mentiras, y la ciudad empezaba a dudar de Peaches.

Peaches se sentó frente al televisor en su pequeño apartamento, encendió el televisor y sintonizó el canal de noticias local, preparándose para enfrentar la narrativa distorsionada que Max había tejido en su contra.

El presentador del programa nocturno apareció en la pantalla, serio y profesional, con imágenes de Peaches tomadas en momentos desfavorables o fuera de contexto.

Las palabras del presentador resonaban en el silencioso apartamento, distorsionando la verdad con cada afirmación sesgada.

"Esta noche, un giro impactante en la historia de nuestra ciudad. Peaches, la famosa costurera, se ha revelado como la mujer gato que fue vista como una heroína en la lucha contra la plaga de ratas, pero, ahora enfrenta acusaciones graves."

"Nuevas evidencias sugieren que Peaches podría estar involucrada en los disturbios recientes y se la vincula con los actos de magia que han causado estragos en nuestras calles."

El programa mostraba imágenes de Peaches caminando por la calle, hablando con los gatos mágicos de la ciudad, yendo y viniendo de su apartamento.

Cada escena estaba montada para alimentar la narrativa de traición y engaño, mientras el presentador continuaba con su relato.

"Testigos informan que Peaches ha sido vista en reuniones clandestinas con individuos del mundo mágico, y se sospecha que está planeando más hechizos para alterar el orden público. Además, hay informes de que las ratas mutantes, que han plagado nuestras calles recientemente, podrían estar vinculadas a experimentos de magia oscura realizados por Peaches. Las autoridades han emitido una advertencia: no se acerquen a esta mujer, ya que podría representar una amenaza para la seguridad de nuestra ciudad."

Las imágenes mostraban fragmentos de su vida, distorsionados y manipulados.

Ella, quien había dedicado su vida a proteger a la ciudad y descubrir la verdad, ahora era vista como una enemiga del orden y la paz.

Peaches apretó los puños, sintiendo la injusticia de cada palabra que salía de la boca del presentador.

La ira y la frustración crecían en su interior, pero también sabía que esto era solo el comienzo de una batalla mediática diseñada para socavar su credibilidad y mantener a Max en el poder.

Las lágrimas brotaron de sus ojos mientras las imágenes seguían mostrando fragmentos de su vida, distorsionados y manipulados.

Ella, quien había dedicado su vida a proteger a la ciudad y descubrir la verdad, ahora era vista como una enemiga del orden y la paz.

Finalmente, el segmento concluyó con un último golpe, una imagen de Peaches con la etiqueta "TRAIDORA" en letras grandes debajo de su rostro.

El presentador miró a la cámara con severidad.

"La pregunta que todos se hacen: ¿Quién es realmente Peaches? ¿Una heroína caída en desgracia o una villana disfrazada de inocente? La ciudad espera respuestas mientras el drama continúa desarrollándose."

El televisor se apagó automáticamente, dejando a Peaches en la oscuridad de su apartamento.

Sabía que el siguiente paso no podía ser otro que enfrentar a Max directamente, exponerlo por lo que era y limpiar su nombre ante la ciudad que había jurado proteger.

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Max, en un acto desesperado por consolidar su poder, accedió a magia oscura.

Convirtió a las ratas de la ciudad en mutantes, seres horribles y destructivos.

El caos se apoderó de la ciudad cuando las ratas mutantes comenzaron a atacar a los ciudadanos, destruyendo todo a su paso.

Las calles se llenaron de gritos y el sonido de destrucción.

Los ciudadanos, aterrorizados, buscaban refugio mientras la plaga de ratas se expandía.

Peaches, observando el caos desde su ventana, sintió una mezcla de rabia y tristeza.

Sabía que Max estaba detrás de esto, y que necesitaba actuar rápidamente para salvar a la ciudad.

Con la ciudad en su contra, sabía que no podía hacerlo sola.

Contactó a Lila y a otros aliados del mundo mágico, explicándoles la situación.

Juntos, decidieron que la única manera de detener la plaga era enfrentarse directamente a las ratas mutantes y exponer a Max.

Peaches, con sus poderes felinos y la ayuda de los gatos mágicos de la ciudad, lideró la resistencia.

Los gatos, con su agilidad y destreza, se enfrentaron a las ratas mutantes, usando su magia para debilitar y destruir a las criaturas.

El mundo mágico se unió en una batalla épica contra la plaga, con hechizos volando por el aire y destellos de luz iluminando las calles.

Las ratas mutantes atacaban con ferocidad, pero Peaches y sus aliados se mantenían firmes.

Con cada golpe, con cada hechizo, la marea comenzaba a cambiar a su favor.

Peaches, vestida con su traje, en el centro de la batalla, luchaba con una valentía inquebrantable, su amor por la ciudad le daba la fuerza necesaria para seguir adelante.

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Finalmente, después de una larga y ardua batalla, las ratas mutantes fueron derrotadas.

La ciudad, aunque herida, comenzaba a recuperarse.

Peaches sabía que la verdadera batalla aún no había terminado. Max seguía siendo una amenaza, y necesitaba ser desenmascarado.

Se dirigió al centro de la ciudad, donde Max estaba dirigiendo un discurso público, pintándose como el salvador en medio del caos.

Con el corazón latiendo con fuerza, avanzó hacia él, con la multitud observando con atención.

—¡Max! —gritó Peaches, su voz desafiante resonó por toda la plaza—. ¡Tu reinado de mentiras termina hoy!

THE BOY IS MINE - Ariana Grande x Pen BadgleyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora