00|𝑸𝒖𝒊𝒆𝒓𝒐 𝒆𝒍 𝒅𝒊𝒗𝒐𝒓𝒄𝒊𝒐.

1K 98 27
                                    

- ¡Bible, te pedí una cosa, tan solo una cosa sencilla y tú no lo hiciste! - gritó molesto el castaño a su esposo sentado delante del televisor mirando un partido de sabrá dios que año.

- Estaba cansado, además, es tu deber no el mío.

- ¡Solo tenías que lavar los platos Bible!

- Estaba cansado ya te lo dije.

- ¡Pero no te iba a tomar más de unos diez minutos!

- ¡No es mi trabajo hacerlo! ¿¡Quien es el que debe de hacerse cargo de las cosas del hogar!? Tu, no yo.

- ¡Solo era un favor!¡Llegué cansado del trabajo, hubo muchos pacientes y después fui a visitar a mi mamá y atenderla estuve todo el día ocupado y te mande un mensaje pidiendo que laves los platos !

- ¿Crees que yo no me cansé en el trabajo? ¿Crees que enfrentarme a criminales, arriesgar mi vida en un tiroteo es fácil y sencillo?

- No, claro que no, pero llegas más temprano que yo esta semana porque no tienes turno ni nada, Bible.

- Si tanto te molesta que no haya lavado los platos, no deberías permitir que se reúnan.

- Ya te dije que tuve un día muy ajetreado, mi madre se puso mal, no está recibiendo la atención que merece y necesito dinero para sus medicamentos y demás cosas, tú lo sabes Bible.

- Que te gastes el dinero que te doy en idioteces no es mi problema.

- ¿Idioteces? El dinero que me das no alcanza, si no fuera porque trabajo no tendríamos que comer, ¡Tú solo me das la cuarta parte de tu sueldo!

- ¡¡Ya cállate!!¡No te aguanto!¡Lo único que haces es quejarte de todo! ¡¡Me tienes harto!! ¡¡Estoy cansado de ti, estoy cansado de escucharte!!- explotó el pelinegro mirando con furia a su castaño esposo el cual retrocedió asustado ante los gritos - ¡¡Me mato la vida trabajando y tú te quejas!!

- S-solo te pido que me ayudes- susurró con temor el castaño.

- ¡Es tu deber, yo te doy el dinero si no te alcanza es tu problema!- tomó de ambos brazos a su esposo y comenzó a zarandearlo con brusquedad lastimando la delicada piel de su esposo.- ¡Ya no quiero escucharte más!

- B-Bible, me estás lastimando - sollozó Build haciendo que el pelinegro lo soltara e inmediatamente el castaño empezó a acariciar sus brazos lastimados mirando con lágrimas contenidas a su esposo.

Hasta hace algunos años no le hubiera importado los gritos de su esposo, es más, se hubiera enojado aún más para luego irse a encerrar en el cuarto y no salir hasta que Bible le pida disculpas, pero eso ya no existía, todo eso había acabado hace mucho tiempo, haciendo que Build soporte años de humillación y dolor.

Pensando que su esposo volvería a ser aquel muchacho del que se había enamorado y con el que se había casado, pero con el paso del tiempo las cosas iban empeorando, discutían de cualquier cosa, por muy mínima que sea ya estaban a los gritos.

Vió como el pelinegro apagó la televisión para luego tomar su chaqueta y las llaves de su auto con intenciones de salir de casa, como siempre hacia cuando terminaban de pelear, irse a beber con sus amigos y revolcarse con quien se le ponga en frente.

Las lágrimas comenzaron a descender por las pálidas mejillas de Build quien miraba cada movimiento que hacía su esposo, estando consciente de lo que haría su esposo si salía por esa puerta.

- Q-quiero el divorcio- murmuró el castaño limpiando bruscamente las rebeldes lágrimas que había soltado.- Ya no aguanto esto, me quiero divorciar.- vió la espalda de Bible tensarse ante sus palabras pero no dijo nada, tan solo abrió la puerta y cerrándola de un portazo abandonó la casa.

Reconquête | BibleBuildDonde viven las historias. Descúbrelo ahora