Capítulo 12.

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Líbranos de la tentación y protégenos de todo mal, amén.

advertencia de capítulo: pensamientos impuros, descripción de violencia, canibalismo, experiencia cercana a la muerte.

Confiteor deo omnipotenti, beate mariae semper virgini.

Beato Michaeli Archangelo, Santis Apostolis Omnibus Sanctis.

Se salió de control, esto se escapó de sus manos. Huiste nuevamente, cayendo otra vez al fuego eterno. Escogiste ese camino por segunda vez, en lugar de él. ¿Por qué lo escogiste por encima de él?, otra vez elegiste a Lucifer por encima de Miguel. Eso le ofendió tanto, se sintió poca cosa para ti. Él es mil veces mejor: más fuerte, más poderoso, más sabio y, sobre todo, más encantador.

No sirvió de nada, escogiste a Lucifer nuevamente.

"Por los clavos de Cristo, ¡¿por qué?!" cae en ira, pateando una de las patas del escritorio. "Esto no me puede estar sucediendo. ¡Ingrata!" grita, esta vez impacta un puño contra la pared, deja una abolladura.

Está agitado, debe calmarse. Se supone que sería perfecto, sin cometer ningún desliz en su puesto como arcángel. Ahora míralo, no puede controlarse a sí mismo. Tú no lo mereces, no tienes derecho a ponerlo en ese estado. Eres una simple e insignificante ángel exiliada. Vales poco ante él y los demás. Eres nadie para el cielo.

Aunque, está en caos interno por ti.

"Debió quedarse conmigo, elegirme a mí en vez de. . .de, ¡ese malnacido!" el color de sus iris se sumerge entre las tinieblas del odio y la ambición, ni siquiera te ama, sin embargo, te quiere para él.

Beata María, tú sabes que hombre recto soy, que orgulloso lucho contra el mal.

Como si fueras un objeto, como si no tuvieras sentimientos, como si tú. . .no estuvieras viva.

Miguel no puede entenderte y tampoco le gustaría hacerlo, ¿a quién le interesa tus problemas mentales y familiares?, ese no es su problema. Lo tenías todo, pero, fuiste tan idiota para perderlo por el tonto de su hermano menor. Te dejaste cegar y era de esperarse, una mentecita tan empática como la tuya es una presa fácil para Lucifer. Ja, por eso caíste en primer lugar, por tu insolencia y rebelión. Siempre fuiste de un espíritu rebelde, eso le gustó de ti.

Sus hermanos le advirtieron de aquel sentimiento contrario al amor verdadero.

Deseo.

Lujuria.

Miel y Café. | Lucifer Morningstar.|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora