Ours II Pequeña Casualidad II Ale & Martin

Parte 13-Es mi niña

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NARRA ALE

Cuando llegamos al hospital, Martín se había quedado dormido sobre mis piernas. Me supo mal tener que despertarlo después del día que llevaba, pero mejor despertarlo yo que Gavi. 

No sabría decir como me sentía en ese momento. ¿Felicidad? ¿Ilusión? era una mezcla rara de sentimientos que nunca pensé que llegaría a experimentar hace 6 meses. Martín me había dicho que.. bueno quería estar conmigo, aunque tampoco llegamos a profundizar mucho en lo que "éramos" el uno para el otro ahora, pero.. parecía que yo le importaba más que como una simple mejor amiga. Y con eso.. tenía un problema. 

Mario, 

Si Mario se llegaba a enterar, no quería ni imaginar lo que me haría a mi o a Martín. 

Debía tomarme las cosas con calma con Martín, o al menos hasta que se me ocurriera como solucionar el tema de Mario. 

Intenté evadirme de todas esas preocupaciones y centrarme en lo importante. Martín. Tenía un golpe muy feo en la cabeza y el pobre estaba dolorido e insoportable. Parecía un niño mimado quejándose todo el rato, pero es que el siempre había sido un enfermo muy malo, desde pequeño, mama siempre decía que era el más quejica de los cuatro. 

-No, de ninguna manera pienso quedarme a pasar la noche en el hospital-Martín se cruzó de brazos en la cama del hospital y negó mostrando su enfado.

-Martín, los médicos quieren dejarte en observación por si acaso-intentó convencerlo Gavi-no hay más que decir, es un traumatismo fuerte en la cabeza, y encima estás mareado  y te duele. Es por precaución.

-Que me da igual, me quiero ir a mi casa, las pruebas han salido bien..es lo único que me importa. Llevadme a casa-nos ordenó.

-Venga, no te pongas así- me senté en el borde la cama y cogí su mano-que solo va a ser una noche y mañana por la mañana estarás ya en casa. 

-Pero no quiero..sabes que no me gustan los hospitales. Odio estar aquí solo me trae malos recuerdos y no me gusta. Estoy bien- puso carita de pena que me derritió por dentro, porque sino era suficientemente guapo el condenado, con esa cara no se le podía decir que no.

-Yo me quedo contigo- ofreció mi padre- no te vas a enterar. 

Martín soltó un sonoro resoplido y fulminó a Gavi con la mirada.

-Si con eso pretendías convencerme, has tenido el efecto rebote y me has quitado aun más las ganas , joder- Martín cerró los ojos y apretó la mandíbula-menuda mierda estar aquí, todo me tiene que pasar a mi. Que asco.

Pude ver como la cara de Gavi se entristeció, por mucho que intentara un acercamiento con Martín, el se cerraba en banda y no le apetecía nada de lo que le proponía su padre. 

-Bueno, pues que se quede Ale.. si ella quiere- suspiró Gavi dejándose caer en la silla. 

Martín me miró de reojo para ver mi reacción y yo solo asentí sonriendo.

No me importaba para nada quedarme con el por la noche, pero me sabía lo duro que era algunas veces con su padre. Gavi no lo había hecho bien muchas veces, pero ahora lo estaba intentando a su manera.. solo que Martín no lo quería ver así.

-Podemos quedarnos los dos- propuse- yo soy menor.. y Gavi hace de "adulto"

-Yo también soy adulto-me rebatió Martín-no necesitamos a otro.

-Bueno, según como se mire, lo de "Adulto" es discutible- me burlé un poco de el y Martín solo ladeó los ojos. 

-Que haga lo que quiera, mientras tu te quedes- sentenció dando por zanjado el asunto.