Salvavidas <OSOKARA>

Nueva cercanía

-Buenas -Saludo con pena y un suspiro cansado se escucho dentro

-¿Otra vez tú? ¿Esto es algún tipo de fetiche por el dolor? Ya es la 3ra vez que te veo esta semana y solo es martes -Tallo su rostro molesto

Karamatsu sonrío con vergüenza entrando tomando su costado izquierdo con fuerza

-¿Ahora que fue? -Alzó una ceja

-Nothing, un compañero del equipo no midió su distancia adecuadamente y terminó empujándolo con la cadera, e-es un novato, esta bien -

-¿Novato cuando apenas faltan 3 meses para terminar el primer año? -Ironizó

Karamatsu apretó los labios

-Vienes muy seguido aquí, creo que ya pasamos el punto de los accidentes -Reprocho indicándole que se sentará

Karamatsu tomó asiento en la camilla

-Estaré bien, solo necesito un antiflamatorio -Pidió

Ichimatsu negó

-Camisa -

Los ojos azules se abrieron sorprendidos y tomó rápido el borde de su camiseta

-N-No es necesario una exploración, y-yo iré a casa -

Karamatsu intento levantarse pero el médico Ichimatsu lo sostuvo de nuevo

-Bien, niño, tenemos dos opciones ahora mismo: la primera te suelto y llamo a tú tutor legal, segunda te quedas aquí y me dejas hacer mi maldito trabajo -

Karamatsu por primera vez se sintió pequeño ante otra persona

Se arrepintió de haber ido a la enfermería, pudo haber ido fácilmente a la farmacia y compra lo que necesitaba, una ventaja de vivir con Osomatsu es que aprendió que fármacos eran para que cosa, no usaba nada que tuviera que tomar, solo ungüentos

-P-por favor... No le digas a Osomatsu -

Bajo la cabeza temblando, Osomatsu se enojaria al saber que estos "accidentes" llevaban pasando un mes entero

-Oye -Por alguna razón el adolescente parecía un gato herido -Acaso... -Antes de sacar juicios apresurados se inclino a él -Bien, quitatela -

Karamatsu no quería hacerlo, no le molestaba enseñar su cuerpo, estaba orgulloso de sí mismo, pero no así, estaba herido por su buena fé en la gente

Osomatsu ya lo había regañado antes por este tipo de cosas

No quería que lo volviera a regañar ni que le diera esa mirada de decepción

Por eso le daba vergüenza mostrar su cuerpo cuando estaba herido

Aun así un trato era un trato

-B-Bien... Pero por favor, no le llame -

-Si, si, apúrate -

Karamatsu lentamente se quito la camisa deportiva azul con negro

Ichimatsu abrió los ojos impresionado

Las visitas de Karamatsu se habían limitado en darle algo para el dolor, dejarlo recostarse un rato y simplemente revisar que no sangrara en algún lugar

-Date vuelta -Lo tomo del brazo y lo levanto, no le dio tiempo de hacerlo por su cuenta, lo giro y observo mejor

La piel de Karamatsu estaba llena de hematomas, de distintas tonalidades, moradas, verdes, amarillas, incluso azules, la peor era la de su costado, una gran mancha roja recién manifestada