𝐁𝐑𝐎𝐊𝐄𝐍 𝐇𝐄𝐀𝐑𝐓 ━━ 𝑓𝑎𝑡𝑒: 𝑡ℎ𝑒 𝑤𝑖𝑛𝑥 𝑠𝑎𝑔𝑎.

━━ 𝟎𝟎𝟏.

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𝐁𝐑𝐎𝐊𝐄𝐍 𝐇𝐄𝐀𝐑𝐓 ━━
𝐂𝐇𝐀𝐏𝐓𝐄𝐑 𝐎𝐍𝐄:
𝐴𝑙𝑓𝑒𝑎.

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❝𝑁𝑜 𝑚𝑒 𝑣𝑒𝑟𝑎𝑠 𝑑𝑒𝑠𝑡𝑟𝑜𝑧𝑎𝑑𝑎,
𝑛𝑜 𝑡𝑒 𝑑𝑎𝑟𝑒 𝑒𝑠𝑒 𝑝𝑙𝑎𝑐𝑒𝑟.❞

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                         EL LABIAL fue pintando sus labios de un color rojo vino mate, haciéndolos ver más carnosos y apetecibles a la vista de cualquier hombre. Sus ojos verdes se inspeccionaron así misma viendo que su atuendo no tuviera ninguna imperfección; el pantalón de mezclilla de cintura alta amoldaba bien sus notificadas piernas, el crop top de mangas con ligero escote de color rojo vino hacía resaltar sus pechos de una manera sexy pero sin ser vulgar.

Alboroto un poco su cabellera castaña dándole más volumen a aquellas ondas que caían hasta un poco más abajo de la mitad de su espalda. Había cambiado mucho en aquellas vacaciones, vacaciones en las que se encargo de sacar todo el dolor y de convertirse en otra persona muy diferente a la que era antes y todo por el simple hecho de que no quería que aquel chico que le rompió el corazón viera que en realidad, lo que le había hecho le afecto de sobremanera.

Aquel día cuando llego de Alfea se encerró en su cuarto sin querer ver a nadie, su llanto descontrolado se escucho por todo el castillo del reino de Clock, atrayendo la preocupación de sus padres quienes quisieron saber lo que había pasado. Fue luego de muchos ruegos y súplicas departe de la pareja de castaños que su hija quito el trabado de la puerta y ellos entraron, viendo como las cosas en su habitación estaban suspendidas en el aire, quietas, como si las hubiera detenido para que no se movieran durante un período de tiempo.

La reina Dalia miro a su esposo unos momentos y con cautela comenzó a acercarse a su hija, la cual se encontraba en el suelo con su espalda pegada a la cama, sus brazos abrazando sus piernas y su rostro oculto entre sus rodillas. Entre sollozos y lágrimas, la futura heredera al trono del reino del tiempo le contó a sus padres lo que había pasado, suplicándoles después que no se fueran en contra de la reina de Eraklyon debido a que no quería que se rompieran años de amistad.

Terrence apretó los labios furioso ante la petición de su hija, sin embargo, cumplió su petición, no solo porque ella le había suplicado, sino por el simple hecho de que la culpa que habitaba en su pecho desde hace años lo hicieron no querer ir a Alfea y golpear al hijo del que alguna vez fue su mejor amigo. Lo que no pudo evitar fue hacerle una llamada a Samara, diciéndole que no quería que su hijo volviera a acercarse a su hija, explicándole también las razones de esto.