𝐁𝐑𝐎𝐊𝐄𝐍 𝐇𝐄𝐀𝐑𝐓 | ❝𝐶𝑎𝑚𝑏𝑖𝑒 𝑝𝑜𝑟 𝑡𝑖, 𝑝𝑜𝑟𝑞𝑢𝑒 𝑚𝑒 𝑟𝑜𝑚𝑝𝑖𝑠𝑡𝑒 𝑒𝑙 𝑐𝑜𝑟𝑎𝑧𝑜𝑛.❞
Para Melania, toda su vida estaba perfectamente estructurada: terminar sus estudios en Alfea, convertirse en una perf...
MELANIA VIO con una mueca el como Bloom no podía activar la vasija que la directora Farah había traído al círculo de piedra, una actividad que era para comenzar con el largo año escolar que les esperaba a todas las hadas de Alfea. Aisha, Musa y Terra ya habían pasado y Bloom era la siguiente, sin embargo, no había concentrado bien sus emociones y no había podido invocar su magia, trayendo murmullos de todos los presentes.
Las chicas habían dicho algunas sugerencias para que la pelirroja pudiera activar la vasija, sin embargo, esto solo provoco que el hada del fuego se frustrara y le dijera a la directora que pasara alguien más. Daowling suspiro y asintió con la cabeza, haciendo luego una seña de que podía regresar a su asiento.
— Princesa Melania — llamo la atención de la castaña quien alzo la mirada con rapidez. — ¿Podría pasar por favor?
— Claro, directora — asintió la ojiverde mientras se levantaba de donde estaba sentada que era a un lado de Terra.
— La magia de las hadas de la familia del reino del tiempo controla todos los elementos desde que nacen — comenzó a explicar la mujer de cabellera rubia mientras Melania se posicionaba frente a la vasija. — Pero su magia se centra en la energía de su alrededor, lo que provoca que, como bien su origen lo indica, controlen el tiempo de toda cosa y/o ser vivo.
Daowling se acerco a la ojiverde para dejar un capullo de una mariposa, Melania le dio una ligera sonrisa y, con cuidado, deposito el capullo en la vasija para luego soltar un suspiro y poner sus manos a cada lado del objeto frente a ella. Cerro los ojos, despejando la mente y concentrando sus emociones positivas como muchas veces su madre le había dicho a lo largo de todas esas vacaciones en las que estuvieron entrenando; sintió la energía comenzar a recorrer su cuerpo, la magia comenzar a recorrer sus venas y fue así como todo comenzó.
Sus ojos verdes se abrieron mostrando un brillo arenoso mientras la vasija comenzaba a brillar levemente alzando en una esfera el capullo de la mariposa. Su mirada estaba fija en el retoño, viendo como en la esfera el capullo comenzaba a desarrollarse con rapidez, mostrando en pocos minutos a la mariposa batiendo sus alas; una sonrisa se formo en sus labios y miro a la directora que también le sonrió, haciéndole luego una seña que la menor entendió con rapidez.
