Molestia, intolerancia, orgullo, excitación, tensión y taquicardia ¿Qué sentir era más fuerte, cuando se encontraban el uno con el otro?
Jimin era un hombre hostil. No había algo que le importara además de su hijo, mientras Yoongi solo era un hombre...
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-Buenas noches sargento Park- saludaron con completo respeto aquellos soldados que hacían una reverencia ante Jimin, estaban tan acostumbrados a su presencia a ese tipo de hora, que no era necesario el pronunciar su deseo para obtener una respuesta
-En esta ocasión solo obtendrá treinta minutos- informó el soldado de hebras castañas, incorporándose de su reverencia, observando el lento asentimiento del pelirrojo, no se veía muy convencido
Pero debía obedecer y no objetar ante una orden superior
-Requiero que el registro sea nulo- exigió
-No reportaremos su visita- aseguró el hombre al costado del castaño, ganándose la aprobación, sin embargo, era notoria la intranquilidad del sargento por ingresar a las celdas- el registro no será hecho
-Bien- se limitó a decir, conforme con las palabras de los soldados, confiando plenamente en los soldados del pelotón de Taehyung, dando tres pasos hacia el inicio de las celdas, el camino siendo despejado para él
Joder, se sentía ansioso, odiaba tener que entrar en ese lugar por un motivo y que dichoso motivo fuera cierto soldado de su pelotón que no paraba de meterse en problemas, dichoso soldado que fue capaz de moretear el rostro de un general
En pocas palabras su padre
No le molestaba, claro que no, le enfurecía la sobre exageración de todo, su soldado no merecía permanecer tanto tiempo encarcelado, es decir, no era como si no le importara el reglamento, pero todo aquello había sido más de lo que debió ser
Conocía a la perfección a su padre y lo insensato que podía llegar a ser
Los rangos podían irse a la mierda si se lo preguntaran como un ciudadano común y corriente, no, a quien quería engañar, quería gritarle a todos que se pudrieran y golpear con sus propios puños a su padre por crear un escándalo antes de partir como el cobarde que era
Una maldita perra cobarde que huía con la cola entre sus patas al recibir una paliza por un hombre que creyó inofensivo por tener a su bebé
Tenia tanto coraje acumulado
Yoongi no merecía estar una eternidad en una celda con una escasa atención... aunque admitía que si no fuera por su cordura y leve razonamiento, sería una condena que estarían pagando juntos y aquello no sería una visita prohibida a la cinco de la mañana
